Investigación
'Caso Koldo'

Ábalos y su novia disfrutaron del chalet que Koldo construyó en Alicante con dinero de las mordidas

El ex ministro y su entonces pareja acudieron pensando que era un Airbnb pero la sacarina desveló a Koldo García

José Luis Ábalos y Andrea de la Torre, la última novia del ex ministro, estuvieron en el verano de 2023 en el lujoso chalet, de 206 m2 con parcela de 4.096 m2 y piscina, en Polop, provincia de Alicante, que consiguió Koldo García tras el pelotazo de los contratos ministeriales de mascarillas. Fuentes consultadas por OKDIARIO confirman que el ex ministro, que tiene problemas para veranear en lugares concurridos donde podría ser reconocido e increpado, eligió este discreto enclave alejado de miradas indiscretas.

Aunque existían sospechas de que Ábalos pudo beneficiarse de las mordidas en los contratos de mascarillas que centran la investigación del caso Koldo, el ex ministro y su novia habrían acudido engañados bajo la premisa de que era un Airbnb que Koldo había conseguido a buen precio.

Sin embargo, comenzaron a sospechar cuando notaron detalles, como la ausencia de azúcar y la presencia de sacarina en la vivienda, un detalle significativo ya que Koldo no consume azúcar. Este extremo apunta a que en ningún caso Koldo sería el testaferro de Ábalos de esa propiedad u otras.

Según personas de su entorno, Ábalos se siente profundamente defraudado por su ex asesor. Allegados le han visto incluso gritando a la televisión al conocer los negocios opacos de quien fuera su hombre de máxima confianza hasta hace poco.

Ábalos ha tenido al menos cinco parejas conocidas. Con las tres primeras pasó por el altar. Tiene cinco hijos, uno de ellos ya le ha dado nietos. Estando en el ministerio estuvo con Jésica Rodríguez. Justo antes de su cese como ministro empezó a conocer a su última pareja. No obstante, las tensiones familiares y la presión mediática tras el estallido del escándalo judicial ha terminado por romper esa última relación con Andrea de la Torre, una joven malagueña de 27 años.

El germen de la investigación

El chalet de Polop es precisamente una de las propiedades que destapó la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en su informe que abrió el caso. Los investigadores destaparon un incremento patrimonial sospechoso de Koldo García en un informe que ha sido clave para la investigación, primero en la Audiencia Nacional y posteriormente en el Tribunal Supremo.

Según detalla el informe de la UCO, la finca, situada en Polop, fue adquirida en diciembre de 2020 por Joseba García, hermano de Koldo, por 225.000 euros. Para su compra se formalizó una hipoteca con el BBVA por valor de 191.250 euros, aunque su valor de tasación ascendía a 251.257 euros. Luego se construyó un inmueble de diseño con grandes calidades.

Chalet donde vacacionaron Ábalos y su entonces pareja.

La propiedad cuenta con amplios jardines, zonas de aparcamiento para multitud de vehículos y piscina. Además, los investigadores documentaron la instalación de un punto de recarga para vehículos eléctricos, coincidiendo con la adquisición por parte de la pareja de Koldo, de un KIA Niro eléctrico valorado en unos 28.000 euros.

Una de las características más llamativas de la finca es su sofisticado sistema de seguridad. El informe de la UCO documenta cómo Koldo García fue captado dando instrucciones a los operarios de una empresa de alarmas, encargados de instalar videocámaras en el interior del recinto. Este sistema de vigilancia grabó posteriormente la entrada y registro realizado por los agentes, durante el cual se encontró dinero en efectivo.

Operarios instalando cámaras de seguridad en la casa de Koldo García.

Durante los registros, los agentes encontraron en el chalet 24.000 euros en efectivo, que Koldo justificaría posteriormente como «una tradición familiar» de guardar dinero en casa.

A pesar de figurar a nombre de Joseba García, los investigadores de la UCO documentaron que el uso y disfrute del inmueble correspondía realmente a Koldo García, su entonces mujer y su hija menor. Durante la vigilancia operativa realizada en agosto y noviembre de 2022, los agentes captaron a Koldo mostrando el interior de la finca a terceras personas e impartiendo instrucciones sobre el sistema de seguridad.

Esta finca es sólo una pieza del complejo puzzle inmobiliario adquirido por el entorno de Koldo García tras los contratos de mascarillas. El informe de la UCO detalla que el patrimonio atribuible a su círculo familiar pasó de valorarse en unos 567.775 euros antes de marzo de 2020 a superar el millón de euros después de esa fecha, llegando a un valor de mercado estimado de 1,5 millones considerando la localización privilegiada de los inmuebles en Benidorm y las mejoras realizadas.

Además del chalet de Polop, el entorno familiar adquirió varios pisos en Benidorm, incluidos dos apartamentos en un edificio y otro en otro complejo de primera línea de playa, este último a nombre de su entonces pareja, comprado en diciembre de 2020 por 150.000 euros, un precio significativamente inferior a su valor de mercado estimado en 320.000 euros.

Antes de este chalet Ábalos disfrutó de otras propiedades que han saltado a los medios. La trama pagó durante varios años un piso de lujo en Plaza de España a Jésica Rodríguez y compró un chalet en La Alcaidesa (Cádiz) que luego Ábalos alquiló. También la trama alquiló pisos de Airbnb en Madrid para encuentros privados.