Retiran del Ayuntamiento de Nueva York una estatua de Thomas Jefferson porque tenía más de 600 esclavos

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La estatua de Thomas Jefferson en la sala de juntas del Ayuntamiento de Nueva York, izquierda, y la estatua en detalle, derecha.

El Ayuntamiento de Nueva York aprobó este lunes retirar la estatua de Thomas Jefferson que había presidido la sala de juntas durante más de 100 años, expulsando a uno de los padres fundadores de Estados Unidos y primer autor de la Declaración de Independencia por su pasado esclavista.

El lunes, una comisión del consistorio neoyorquino votó por unanimidad a favor de retirar de la sala de juntas la estatua de Jefferson, que tuvo más de 600 esclavos y tuvo seis hijos con una de ellos, Sally Hemings. El presidente del consejo de la ciudad, Corey Johnson, encabezó el esfuerzo para quitar la estatua en el verano de 2020 con una carta a De Blasio. Johnson escribió que él y los miembros negros, latinos y asiáticos del Concejo Municipal lo encontraron «inapropiado».

Desde hace algunos años, concejales de origen latino y negros habían pedido tímidamente su retirada. Tras muchas discusiones, el lunes decidieron trasladarla a la Sociedad Histórica de Nueva York. «Jefferson representa algunas de las partes más vergonzosas de la larga y matizada historia de nuestro país», dijo la concejal Adrienne Adams.

Al testificar a favor de retirar la estatua, la concejal Inez Barron dijo que los esclavistas actuaban como una especie de «proxeneta» para que las plantaciones pudieran expandirse y las ganancias pudieran «aumentar». También dijo que Jefferson promulgó algunas de las primeras medidas de expulsión contra los nativos americanos, lo que contribuyó a la «limpieza étnica y el reemplazo genocida» de los pueblos indígenas. «No estamos siendo revisionistas. No estamos librando una guerra contra la historia. Estamos diciendo que queremos asegurarnos de que se cuente la historia completa, que no haya medias verdades y que no estamos perpetuando mentiras», dijo Barron.

La concejal Adrienne Adams dijo que «notó inmediatamente la estatua de Thomas Jefferson» después de ser elegida, y calificó la estatua como una de las «más prominentes» de la sala de juntas del Ayuntamiento neoyorquino. «Él … comparó la idea misma de liberar esclavos del cautiverio con el abandono de niños», dijo, y señaló la relación que Jefferson mantuvo con una adolescente esclavizada con la que tuvo hasta seis hijos.

El debate sobre la estatua de Jefferson es parte de un movimiento nacional que surgió a raíz de la muerte de George Floyd, un negro que murió asfixiado bajo la rodilla de un policía y que propició el movimiento Black Lives Matters (La vida de los negros importan), así como las desigualdades raciales que dejó en evidencia la pandemia del coronavirus, y el debate sobre si los monumentos de los confederados deberían ser retirados.

La estatua, hecha en escayola siguiendo el modelo de bronce de Jefferson que se exhibe en la rotonda del Capitolio en Washington, fue encargada en 1833 por Uriah P.Levy, el primer judío comodoro en la Marina estadounidense, para conmemorar el apoyo de uno de los padres de la Patria a la libertad religiosa en las fuerzas armadas.

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