Internacional

La Reina Isabel II, jefa de Estado de Nueva Zelanda, y otros líderes condenan el atentado racista

La Reina Isabel II de Reino Unido, jefa de Estado de Nueva Zelanda, ha asegurado que está "profundamente entristecida" por el atentado terrorista. Junto a ella numerosos dirigentes internacionales han mostrado su consternación y repulsa por el ataque racista perpetrado en una mezquita de Christchurch.

La Reina Isabel II de Reino Unido, jefa de Estado de Nueva Zelanda, ha asegurado que está «profundamente entristecida» por el atentado terrorista que se ha cobrado la vida de 49 personas en dos mezquitas de la localidad neozelandesa de Christchurch.

«Estoy profundamente entristecida por los terroríficos eventos ocurridos en Christchurch. El Príncipe Felipe de Edimburgo y yo mandamos nuestras condolencias a las familias y a los amigos de aquellos que han perdido la vida», ha asegurado la Reina en un comunicado.

«También me gustaría rendir tributo a los servicios de emergencia y a los voluntarios que están prestando su apoyo a aquellos que han sido heridos. En estos momentos trágicos, mis pensamientos y rezos están con todos los neozelandeses», ha señalado.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha enviado su «calurosa simpatía» y sus «mejores deseos» a los ciudadanos de Nueva Zelanda tras los atentados. Trump ha lamentado la muerte de 49 inocentes y del resto de heridos. «Estados Unidos está con Nueva Zelanda para cualquier cosa que podamos hacer. ¡Dios nos bendiga a todos!», ha afirmado.

También este viernes, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, ha tildado el atentado de «despiadado acto de odio».

«Estados Unidos condena firmemente el ataque en Christchurch. Nuestros pensamientos están con las víctimas y sus familias. Estamos en solidaridad con la gente de Nueva Zelanda y con su Gobierno», ha asegurado.

La primera ministra de Reino Unido, Theresa May, ha condenado como un «acto enfermizo de violencia» el atentado.

«De parte de Reino Unido quiero dar mis más profundas condolencias al pueblo de Nueva Zelanda tras este horripilante ataque terrorista de Christchurch», ha manifestado.

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha pedido a la comunidad internacional que actúe contra la «peligrosa tendencia» en la que se están convirtiendo los ataques a musulmanes en las sociedades occidentales por xenófobos e islamófobos de extrema derecha, a quienes comparó con un «cáncer» que se extiende.

Erdogan condenó así los atentados perpetrados este viernes contra dos mezquitas de la población neozelandesa de Christchurch por un autoproclamado nacionalista y enemigo del Islam. «Está claro que la percepción que representaba este asesino ha comenzado a apoderarse de las sociedades occidentales con la velocidad de un cáncer», ha dicho.

«Pedimos al mundo entero y a los países occidentales en particular que tomen medidas urgentes contra esta tendencia peligrosa», ha añadido el primer ministro, que se ha mostrado de la misma opinión que otros mandatarios de países musulmanes.

«La islamofobia actual, generada tras los atentados del 11 de septiembre de 2001», ha declarado el primer ministro paquistaní, Imran Khan, «es la culpa de estos ataques. Están condenando a 1.300 millones de musulmanes de cualquier acto de terrorismo».

La canciller alemana, Ángela Merkel, ha expresado este viernes su pesar por el atentado terrorista y que la mandataria ha descrito como un acto de «odio racista».

«Debemos permanecer unidos ante semejantes actos de terrorismo», ha declarado Merkel a través de su portavoz, Steffen Seibert. «Esa gente estaba rezando en paz en su mezquita», ha lamentado.