Las mujeres en Egipto están cansadas de soportar situaciones de acoso a diario. Por eso, adolescentes y jóvenes se reúnen en el Centro Cultural de El Cairo para aprender defensa personal y mejorar su condición física. Practican el SILAT, un arte marcial que tiene su origen en el Siglo VI. Se caracteriza por sus trajes siameses y sus métodos de lucha chinos. Las reglas del juego son fáciles: los jugadores ganan un punto por golpes, dos puntos por patadas y tres por derribos.
El Cairo es una de las ciudades más peligrosas para las mujeres en el mundo. No cuentan con protección contra la violencia sexual y el acceso a la sanidad que tienen es deficiente. Una nueva arma de las mujeres egipcias para dejar KO a sus agresores.