España
Elecciones en Extremadura

El subidón de Vox en Extremadura: logra casi el 17% de los votos y 11 escaños, más del doble que en 2023

Vox ha protagonizado este domingo un subidón en Extremadura, la comunidad donde se presenta a unas elecciones autonómicas desde hace diez años. La formación de Santiago Abascal, que ha vuelto a ser tercera fuerza, ha logrado casi un 17% de los votos (un 16,90%), más del doble que el 8,13% que obtuvo en mayo de 2023.

Así, la candidatura liderada por Óscar Fernández Calle ha obtenido 11 escaños, seis más que los cinco de los anteriores comicios, y cerca de 90.000 votos, a la espera de contarse el voto exterior. De esta manera, Vox ha pasado de obtener poco más de 1.700 votos (el 0,28%) en los comicios regionales de 2015 y quedar entonces en el octavo puesto –sin representación– a ser ahora una fuerza clave en la gobernabilidad de la comunidad.

En concreto, ha crecido en más de 39.000 papeletas en dos años y medio. Por apuntar otro dato sobre su evolución, en las elecciones de 2019 quedó en quinto lugar con 28.992 papeletas (un 4,71%).

Esta vez el partido de Santiago Abascal se ha posicionado como la tercera fuerza en la Asamblea de Extremadura, por detrás del PP (29 escaños) y el PSOE (18 escaños), y por delante de Unidas por Extremadura (7 escaños).

«Vox es el gran triunfador de estas elecciones regionales, el partido que más ha crecido en votos, escaños y porcentaje, mientras las dos caras del bipartidismo –por PP y PSOE– han visto reducidos sus votos y el apoyo de los extremeños», ha enfatizado el líder de Vox en una comparecencia en la sede nacional del partido.

Por su parte, Fernández Calle ha destacado que «Extremadura ha hablado alto y claro para decir que quiere mucho más Vox, el doble de Vox, más del doble de Vox, y Extremadura lo va a tener», ha apostillado.

Voto joven

Vox ha capitalizado el descontento en zonas rurales y urbanas, apelando especialmente al voto joven y a ejes programáticos como la defensa de la unidad de España, la crítica a las políticas migratorias, la oposición a la Agenda 2030 y el «fanatismo verde», o la defensa del sector primario extremeño, duramente afectado por sequías y regulaciones europeas.

Su discurso directo y sin complejos ha resonado especialmente entre los nuevos votantes y entre aquellos desencantados con el bipartidismo tradicional y con el Gobierno de coalición PP-Vox de la legislatura anterior, que terminó en ruptura por discrepancias presupuestarias.

Un dato significativo ha sido el resultado obtenido en Badajoz, la ciudad más poblada de Extremadura y capital de la provincia que reparte la mayoría de escaños (36 de los 65 totales). En la capital pacense, Vox se ha convertido en la segunda fuerza política, superando al PSOE y quedando sólo por detrás del PP.

Con datos cercanos al 100% escrutado, los de Abascal han logrado alrededor del 21% de los votos en esta ciudad, adelantando claramente a los socialistas, que han sufrido una fuerte caída.

Este sorpasso en Badajoz refleja el avance de Vox en áreas urbanas, donde tradicionalmente el PSOE había mantenido hegemonía, y subraya su capacidad para atraer voto de centro-derecha desilusionado.

En Almaraz y Navalmoral

Asimismo, en zonas rurales también ha sido una tendencia en estos comicios que Vox haya pasado a ser segunda fuerza por delante del PSOE. Es lo ocurrido, por ejemplo, en Almaraz (Cáceres), el municipio de la central nuclear que pretende cerrar el Gobierno. La formación de Abascal ha quedado en segunda posición en esta localidad con 13 puntos más.

De igual modo, en Navalmoral de la Mata, el municipio con mayor peso en la proximidad de la central nuclear de Almaraz, Vox ha ganado 10 puntos más, con un 23% de los votos, siendo también segunda fuerza. Por su parte, los socialistas obtuvieron en 2023 un 30% de los votos, y este domingo han caído 11 puntos. El PP ha ganado cinco puntos, pasando del 40% al 45%. Los populares y Vox se han llevado casi un 70% de los votos.

El contexto general de estas elecciones ha favorecido este ascenso. El PP ha ganado con 29 escaños, uno más que en 2023, pero se ha quedado a cuatro de la mayoría absoluta (33) y ha perdido 10.000 votos, por lo que necesitará nuevamente el apoyo de Vox.

A nivel de toda Extremadura, el PSOE, por su parte, ha sufrido su peor resultado histórico, perdiendo 10 escaños y cayendo a 18 diputados después de haber ganado las elecciones hace dos años y medio.