Iglesias echa mano de la Constitución que él y ETA llamaron «papelito» porque privilegiaba a los franquistas

Pablo Iglesias, líder de Podemos, emula al dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, leyendo la Constitución española en el debate electoral de TVE. La misma Carta Magna que despreció llamándola “el papelito del 78” en junio de 2013 en una taberna navarra porque protegía los franquistas.

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Pablo Iglesias, líder de Podemos, ha sido el dirigente en el debate electoral de TVE que más veces se ha referido a la Constitución española. De hecho, ha llevado un pequeño ejemplar de la Carta Magna para leer algunos de los artículos de la misma, emulando al dictador de Venezuela, Nicolás Maduro o Evo Morales. No obstante, y dejando denotar que está en campaña electoral y con una desbandada importante de votantes de cara al 28-A, el dirigente podemita no debe recordar que en 2013 se refirió a la Carta Magna como «el papelito del 78» despreciando el marco constitucional y denostando el espíritu de la Transición española.

Y no sólo eso, además, acudió al 40 aniversario de la Constitución con un pin morado para reclamar una república para España y protagonizando una afrenta contra la forma política del Estado español: la Monarquía parlamentaría, tal y como reza el Artículo 1 de la Carta Magna de la que tanto está alardeando en el debate de TVE. “La monarquía está relacionada con corrupción y privilegios, por eso apostamos por una España moderna y feminista, de fraternidad y diálogo, y eso es decir República”, espetó en el Congreso ante los medios de comunicación. Además, tildó a nuestra Constitución de “reliquia”, ignorando que es el marco constitucional que garantiza la convivencia de todos los españoles.

Pero, sin duda, no ha sido el peor calificativo que Iglesias ha dedicado a la Carta Magna: “Hay una Constitución material que va más allá de lo que se escribiera en el papelito aquel de 1978 y la primera que se dio cuenta de eso fue la izquierda vasca y fue ETA”, decía el dirigente de Podemos en junio de 2013 en una taberna navarra. “Por mucho procedimiento democrático que haya, hay determinados derechos que no se pueden ejercer en el marco de la legalidad española”, terminaba su intervención.

Añadía, además el dirigente de Podemos, que la Constitución que se instaura en este país –refiriéndose al 78– «no instaura una suerte de reglas del juego democráticas, sino que de alguna manera mantiene una serie de poderes que, de una forma muy lampedusiana , cambiarlo todo para que todo siga igual, permitieron la permanencia de una serie de élites económicas en los principales mecanismos y dispositivos de poder del Estado español”. Es decir, según Iglesias es una Carta Magna elaborada para proteger a las élites del Franquismo, el régimen que España estaba dejando atrás.

La misma Constitución a la que Podemos también despreció en 2016. Ese año en la Cámara Baja se conmemoraron los 38 años del marco constitucional con varios actos, a los cuales Iglesias no acudió para aplaudirla. “La mayor parte de las deficiencias tienen que ver con la resistencia de las élites al cambio y a la democratización”, decía el dirigente morado. Al acto, en lugar de Iglesias, fue el exJEMAD, José Julio Rodríguez, que espetó cuando le preguntaron por la ausencia de Iglesias: “Yo voy donde me mandan”.

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