España
Presos etarras

El Gobierno vasco permite a otra etarra salir de la cárcel para ir al médico sin custodia policial

La etarra Alicia Sáez de la Cuesta fue condenada a 29 años de prisión por asesinar a un guardia civil

La líder de Bildu que puede investir a Chivite homenajeó a una etarra condenada a 700 años

El Gobierno vasco de Íñigo Urkullu concedió un permiso a una presa de la banda terrorista ETA para que acudiera al médico sin custodia policial. Se trata de Alicia Sáez de la Cuesta, que fue condenada a 29 años de prisión por el asesinato del subteniente retirado de la Guardia Civil Alfonso Parada Ulloa. El crimen se produjo en mayo de 1998 en Vitoria. También fue condenada a 10 años de cárcel por el intento de asesinato en 2001 contra el ex presidenta de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga. Ella lleva en prisión desde el 2001 y en 2022 fue acercada a la prisión de Zaballa, ubicada en Álava.

Sáez de la Cuesta tenía previstas este martes dos citas médicas. Esta salida quedó registrada en el orden del día e la unidad y una patrulla de la Brigada Móvil, que se encarga de conducir a los presos durante este tipo de salidas. Los efectivos policiales sí que acudieron a su salida de la cárcel para custodiarla. Sin embargo, en la cárcel les dijeron que no era necesaria la custodia a la presa etarra debido a que se había concedido a Sáez de la Cuesta una salida «autogestionada», es decir, que la misma presa se iba a encargar de salir y volver a la prisión «por sus propios medios. Los agentes de la Ertzaintza que se encargan de este tipo de traslados defienden que «jamás» habían visto un «procedimiento similar».

Este permiso para ir al médico fue concedido por Administración Penitenciaria, un organismo dependiente del departamento vasco de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Ejecutivo vasco que dirige Íñigo Urkullu. La consejera de esta departamento es Nerea Melgosa, también del PNV. Esta Consejería asumió las competencias de las tres prisiones del País Vasco en 2021, tras el acuerdo del Gobierno de Pedro Sánchez con el Ejecutivo vasco. Este permiso se produce cinco días después de que el Gobierno de Urkullu concediera un permiso al etarra Mikel Otegi para que acudiera al médico sin ningún tipo de custodia policial.

«Ningún privilegio»

Desde el Ejecutivo vasco sostienen que este tipo de permisos no son «ningún privilegio» y que se ajustan «al reglamento penitenciario». En concreto, se remiten al artículo 155.4 del Reglamento Penitenciario, que regula los permisos penitenciarios que se conceden a los presos. Este texto también recoge la opción de que el reo use «use medios propios» y no tenga custodia policial, bajo el término «autogobierno». El permiso que se le concedió a Alicia Sáez de la Cuesta, adelantado por El Correo, se trata de un «permiso extraordinario» de salida autorizado por las autoridades penitenciarias, siempre que la situación penal y penitenciaria del recluso lo permita y se den una serie de condiciones como por ejemplo que «no haya riesgo de fuga».

El Ejecutivo autonómico de Urkullu recalcan que estos permisos no son «privilegios» porque se conceden «cuando se cumplen los requisitos establecidos, que son los mismos para todos los presos, tanto los de ETA como los comunes». «El objetivo es tratar de concienciar a los reclusos de que usen sus propios recursos en la gestión de sus necesidades de atención médica extrapenitenciaria, así como racionalizar la utilización de recursos públicos derivados de una custodia policial cuando ésta no es necesaria», señalan desde la Consejería de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales.

El Gobierno liderado por Íñigo Urkullu sostiene que las salidas para recibir atención médica de los presos cuentan con «tiempos muy pausados». Un preso de la cárcel de Zaballa, donde se encuentra la presa etarra Alicia Sáez de la Cuesta, cuenta con un margen de tiempo de una hora en caso de que su cita médica sea en Vitoria. El médico debe dejar constancia de cuándo termina la consulta y desde ese momento el preso tiene otra hora para regresar al centro penitenciario.