Los espías del catalán en los colegios montan ahora una encuesta para criminalizar a la Guardia Civil
La denominada Plataforma per la Llengua, entidad que espió a los niños en los colegios para conocer el calado del catalán en las aulas, ha publicado un estudio en el que asegura que tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil discriminan a los ciudadanos que no hablan con ellas en español.
Las conclusiones de la entidad salen de una supuesta encuesta que empieza con dos preguntas. “Imagina que vas en coche por una carretera situada en Cataluña y un agente de la Guardia Civil le hace un gesto para que se detenga. ¿En qué lengua le hablarías?”, es la primera cuestión a la que se han enfrentado los participantes. La segunda trata, simplemente, de justificar la respuesta de la pregunta anterior.
El estudio asegura que desde el año 2007 se han detectado 68 discriminaciones lingüísticas por parte de la Policía y la Guardia Civil, y que solo el 3% han tenido consecuencias penales. Además, afirma que “los cuerpos policiales del Estado gozan de una total impunidad y amparo por parte del Gobierno español”, por lo que exige que se sancione a los agentes.
Según la Plataforma per la Llengua, los motivos por los que los ciudadanos no hablan en catalán a los policías es el “desconocimiento o renuncia a los derechos lingüísticos o para evitar problemas”. Con ello, culpan a los policías de que no se dirijan a ellos en catalán y sí en español.
2 millones de financiación
El Govern de Quim Torra subvencionará a la Plataforma con 2 millones de euros hasta 2021, dinero que entregará sin nominalmente, sin necesidad de concurrencia pública.
La entidad provocó una polémica hace meses al salir a la luz pública que infiltró espías en 50 colegios catalanes para comprobar si los alumnos hablaban español en los centros educativos.
A principios de diciembre, los socialistas catalanes y Podemos se aliaron con los independentistas que gobiernan la Generalitat para tumbar una iniciativa de Ciudadanos que pretendía acabar con las subvenciones a la entidad que espió a los alumnos y profesores de medio centenar de colegios para comprobar su grado de uso del catalán en los recreos.