C’s sólo relajará su veto al PSOE para pactar en Navarra y la alcaldía de Barcelona

La dirección de Ciudadanos sólo contempla hacer «dos excepciones» en su política de pactos respecto al PSOE. Se trata del Ayuntamiento de Barcelona y el Gobierno de Navarra, donde la formación de Albert Rivera está dispuesta a relajar sus exigencias con los socialistas para llegar a acuerdos que impidan que separatistas, nacionalistas y populistas gobiernen dichas instituciones, según aseguran fuentes de la dirección centrista.

La Ejecutiva naranja aprobó este lunes que no alcanzará ningún acuerdo de gobierno con el PSOE si el candidato socialista de turno no se desmarca de las políticas de Pedro Sánchez, sobre todo de sus concesiones al separatismo. Por ejemplo, C’s ha incluido en su decálogo de negociación para las comunidades autónomas que el aspirante socialista acepte la aplicación del artículo 155 en Cataluña.

Las fuentes citadas sostienen que C’s admitirá aquí cierto margen en la respuesta de los socialistas con tal de evitar que gobiernen el separatista Ernest Maragall o la populista-nacionalista Ada Colau en el Ayuntamiento de Barcelona o que lo haga la socialista Chivite con la marca del PNV (Geroa Bai) en Navarra gracias a la abstención de los proetarras de EH Bildu.

De esta manera, la Ejecutiva de Rivera ha descartado la opción «menos mala» de hacer alcaldesa a Colau antes que Maragall según han planteado tanto el candidato de la marca de Ciudadanos en Barcelona, Manuel Valls, como un sector de la formación naranja encabezado por su responsable de Economía, Luis Garicano.

Además, en el cuartel general de los naranjas, según las fuentes citadas, están convencidos de que Colau y Maragall alcanzarán un acuerdo más pronto que tarde, por lo que creen que no será necesario profundizar en negociaciones con los socialistas para investir a Jaume Collboni. En todo caso, C’s nunca facilitaría un gobierno del PSC en el que estuvieran los comunes.

«Recapacite»

Por su parte, el candidato de Navarra Suma —la coalición que integran PP, Ciudadanos y UPN— a la Presidencia del Gobierno foral, Javier Esparza, afirmó este lunes que su mano está «tendida» para hablar con los socialistas sobre la formación del Ejecutivo foral y pidió así al PSN que «recapacite y que interprete bien el mandato de los ciudadanos».

Javier Esparza declaró en una entrevista en Onda Cero que el cuatripartito que ha sostenido al Gobierno foral en la última legislatura «ha pasado de 26 parlamentarios a 19 y, por contra, aquellos que estábamos en la oposición tenemos una mayoría para conformar un proyecto que sea estable, para conformar un Gobierno constitucionalista en Navarra, que se aleje de políticas nacionalistas e identitarias, que es lo que hemos tenido a lo largo de toda la legislatura», recogió Ep.

En esta comunidad, el plan de Navarra Suma pasa por intentar que los socialistas permitan —es suficiente con la abstención— la investidura de Esparza, pues desde la coalición constitucionalista subrayan que «hemos dicho por activa y por pasiva» que no haríamos presidenta a Chivite y además «hemos ganado nosotros con 20 escaños», siendo la fuerza más votada.