Cepeda (PSOE) espió a una diputada del PP y fue denunciado por pinchar el móvil de una ex novia por celos

El eurodiputado José Cepeda (PSOE), quien este viernes defendía en Todo es Mentira la gestión de la AEMET durante la DANA valenciana atacando a OKDIARIO, fue acusado en 2013 de haber espiado y acosado tres años antes a una ex novia y compañera de partido usando medios públicos de la Asamblea de Madrid. La víctima era Noelia Martínez, que presentó una querella criminal que recayó en el Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid.

Según un demoledor informe de Telefónica, ratificado judicialmente, Cepeda, ingeniero informático de profesión, instaló un programa espía (troyano Flexispy) en un teléfono móvil que posteriormente regaló a Noelia Martínez, entonces su novia y concejal socialista del Ayuntamiento de Madrid. El sistema permitía que todas las llamadas y mensajes de Martínez fueran automáticamente desviados al móvil de Cepeda, que utilizaba una línea oficial de la Asamblea de Madrid.

La gravedad del caso llevó a que el departamento de Riesgo y Fraude de Telefónica lo calificara como «sumamente delicado por posible espionaje político». El caso no se limitó a Martínez: Cepeda también había espiado en 2006 a la diputada popular Ana Paula Vicente, que tenía una gran proyección en la Comunidad de Madrid, pero ésta decidió no denunciar al entonces diputado autonómico socialista.

Denuncia formal

La víctima, que presentó una denuncia formal ante la Comisión de Garantías de Igualdad del PSOE en 2015, declaró estar «dispuesta a llegar hasta el final» y recordó que «los miembros del PSOE tienen la obligación de informar al partido si hay una investigación abierta sobre su persona». Cepeda, que llegó a ser jefe de campaña de Pedro Sánchez a la Secretaría General del PSOE y ocupó el número 11 en la lista socialista a la Comunidad de Madrid, negó todos los hechos.

Martínez declaró a El Mundo que Cepeda «regalaba los modelos de móviles que se le quedaban anticuados», una práctica que, según la investigación, habría utilizado para llevar a cabo el espionaje. «El silencio no debe formar parte de la vida de nadie», manifestó Martínez al explicar su decisión de llevar el caso ante los órganos internos del partido.

Tras conocer la denuncia, las Juventudes Socialistas pidieron la expulsión de la lista de José Cepeda, entonces unos de los perros de presa de Ángel Gabilondo en el PSOE madrileño. Pero el PSOE abandonó a Martínez y no hizo nada por defenderla de los comportamientos machistas de Cepeda, uno de los hombres fuertes en el grupo parlamentario en la Asamblea de Madrid por aquellas fechas. Los socialistas no movieron un dedo aún sabiendo que el informe de Telefónica alertaba de que otro tercer teléfono, además de los de Noelia Martínez y Ana Paula Vicente Benítez, también había sido víctima del ataque del troyano.

Lo curioso fue que esta denuncia se produjo cuando el PSOE había creado una Comisión de Garantía de la Igualdad tras el caso Nevenka, donde los socialistas ganaron la alcaldía de Ponferrada gracias al apoyo de un concejal condenado por acoso sexual. «¿Para qué se creó entonces este órgano si no actúa cuando hay un caso tan evidente de espionaje como el mío?”, se preguntaba la víctima en declaraciones a los medios.

El órgano, que inició su actividad en marzo de 2013, tenía como mandato asegurar que todas las decisiones internas del partido se sometan a «una necesaria reflexión desde la perspectiva de la igualdad de género». Pero el caso del acoso a Martínez no mereció reflexión alguna para los socialistas y Cepeda no fue condenado tras este grave denuncia.