Economía
por las duras condiciones del mercado

Telefónica prepara un nuevo plan de salidas voluntarias para su plantilla en España

Telefónica valora el lanzamiento de un nuevo plan de salidas voluntarias para sus trabajadores en España ante las duras condiciones del mercado español y su viraje hacia el low cost. La empresa no ha hecho comentarios, mientras que desde los principales sindicatos (UGT Y CCOO) se traslada que no hay ninguna mesa de negociación ni han sido convocados a negociar ningún proceso similar por el momento.

«Oficialmente no hay nada», resumía en un comunicado difundido esta mañana UGT. En los últimos años, desde el sindicato, ya había advertido de las dificultades que atraviesa el sector de las telecomunicaciones, y ahora indica que una de las medidas paliativas que la empresa contempla sería un posible PSI, «que necesariamente se tendría que negociar, siendo notoriamente conocida nuestra postura en los procesos anteriores».

Así, la compañía que dirige José María Álvarez-Pallete va a tomar medidas en materia de empleo para solucionar el principal problema que tiene ahora el grupo tras reducir la deuda gracias al plan estratégico que puso en marcha para hacer frente a la pandemia y poner en valor algunas de las inversiones, tal y como ha avanzado El Confidencial.

En su anterior Plan de Suspensión Individual (PSI), la compañía de telecomunicaciones ofrecía a los trabajadores casi un 70% del salario, el 100% de su pago a la cotización social y el mantenimiento del seguro médico. Telefónica y los sindicatos pactaron durante el verano la renovación del convenio que incluía el piloto de jornada de cuatro días y la recuperación del teletrabajo, pero no se ha abordado este asunto.

Empresas rivales

Sus principales rivales en España, Orange y Vodafone, han protagonizado sendos expedientes de regulación de empleo (ERE) para 400 y 442 salidas, respectivamente por el impacto en el negocio de la crisis del coronavirus, lo que llevó a UGT a denunciar que la tendencia al ‘low cost’ del sector se estaba traduciendo en pérdidas de empleo en los últimos años.

Ambas compañías han terminado primando la voluntariedad, al igual que va a hacer Telefónica, tras negociar el expediente con los sindicatos, si bien el periodo de adscripciones al proceso de Vodafone no ha comenzado, con lo que aún no se puede aventurar si se llenarán las plazas sin despidos forzosos.