Lagarde no evita que el euro se aproxime a la paridad con el dólar
El euro se ha desinflado esta semana hasta las 1,05 unidades por dólar. Los expertos insisten en que sigue su camino hacia la paridad con el dólar y se muestran desencantados con el Banco Central Europeo (BCE) y su presidenta, Christine Lagarde, ante la falta de contundencia acabar con la situación.
La divisa comunitaria pierde más de un 6 por ciento contra el dólar en lo que va de año y el consenso esperaba que la reunión del BCE de esta semana sirviese para estabilizar a la moneda, pero la falta de claridad del organismo en su política monetaria sigue lastrando al euro.
Desde Ebury hablan de «otra actuación poco convincente de la presidenta Lagarde» en la rueda de prensa del jueves. Simon Harvey, director de análisis de divisas en Monex Europe, comenta que el BCE se mostró «ambiguo» en el camino a seguir.
Lagarde confirmó que se producirá una subida gradual y constante de los tipos de interés para contener la inflación, con el objetivo de que en 2024 se sitúe en el 2,1% y prácticamente confirmó que se elevarán en 50 puntos básicos entre julio y septiembre.
Pese a ello, la presidenta enfatizó el hecho de que la política monetaria mantendrá un total opcionalidad y que la hoja de ruta está sujeta a cambios en los próximos meses.
«De este modo, la valoración del mercado de una subida de 50 puntos básicos en la reunión de septiembre pasó de ser un área de apoyo para la
moneda única a una fuente de vulnerabilidad potencial», asegura Harvey.
Los analistas consultados critican la «lentitud» del BCE a la hora de subir tipos y defender la divisa comparado con la «celeridad» de la Reserva Federal de Estados Unidos que los ha elevado en 75 puntos básicos en sus dos últimas reuniones. Además, la mejor salud de la economía estadounidense frente a la de la eurozona eleva el valor del dólar como activo refugio.
La paridad entre las divisas no se da desde hace más de dos décadas y por el lado positivo los expertos destacan el hecho de que Lagarde tiene margen de maniobra para evitar la situación, pero la actuación debería llegar con la reunión del organismo en julio.
Impacto en los bonos, primas de riesgo e inflación
Las tensiones con las que cotiza el euro tienen su impacto directo en el mercado de bonos, las primas de riesgo y la inflación. Así, los expertos no dudan en hablar de fragmentación en estos mercados.
«El Consejo de Gobierno del BCE y Lagarde continuaron con su vago compromiso sobre la herramienta de antifragmentación», explican desde AX IM. Una visión que comparte desde la gestora Ostrum AM al exponer que el organismo «tendrá que ajustar su estrategia para limitar el riesgo de fragmentación financiera en la eurozona».
Desde Ebury se suman a este análisis al declarar que Lagarde no aclaró «no cómo piensa el BCE evitar la fragmentación de los mercados de bonos europeos, provocando una pequeña explosión en los rendimientos de los bonos periféricos».
El interés bono español a 10 años pasó del 2,6 por ciento, máximos de agosto de 2014, y el italiano del 3,6%, niveles de noviembre de 2018 cuando la Comisión Europea vetó por segunda vez los presupuestos del país. Por su parte, el bund alemán, referencia de solvencia en Europa, está en el 1,4%, máximos de mayo de 2014, pero en descenso. La situación de la deuda soberana lleva a las primas de riesgo de España e Italia a los niveles registrados con la eclosión del coronavirus y los confinamientos, hasta los 124 puntos básicos y 250 puntos básicos respectivamente.
La inflación de la eurozona se encuentra en máximos históricos al cerrar mayo en el 8,1% y la debilidad del euro no ayuda pues, como resaltan los analistas, y aunque se mejore la competitividad exportadora, la mayoría de las materias primas se pagan en dólares.