El Gobierno veta la OPA de Hungría sobre Talgo por razones de «seguridad nacional»
La CNMV ha suspendido cautelarmente la cotización de Talgo al conocerse la noticia
La Junta de Inversiones Extranjeras del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa ha vetado este martes la oferta pública de adquisición (OPA) presentada por el grupo de Hungría, Magyar Vagon, para hacerse con el 100% de Talgo, aludiendo a razones de seguridad nacional. Tal y como desveló OKDIARIO, el Gobierno le dijo a la compañía que, si quería cooperar con el fabricante español, tenía que entrar en su capital. Sin embargo, cuando lanzó la OPA, el Ejecutivo se opuso a la misma relacionando al grupo con Viktor Orbán e incluso con Putin.
«El Consejo de Ministros ha acordado hoy no autorizar la inversión extranjera directa en Talgo S.A. por parte de Ganz MaVag Europe Private Limited, por motivo de protección de los intereses estratégicos y de la seguridad nacional de España», ha declarado el Ministerio de Economía en un comunicado.
«Esta autorización fue solicitada por el inversor como requisito legal previo para la ejecución de la OPA por el 100% de Talgo y, por consiguiente, no podrá tener lugar», sentencia. «La no autorización de la operación se produce en aplicación de la normativa vigente en nuestro país en materia de control de inversiones exteriores y con pleno respeto al Derecho comunitario y las competencias de la Unión Europea sobre inversiones extranjeras directas, protección del mercado interior y la libre circulación de capitales», justifica el departamento.
Justo antes de conocer la noticia, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha decidido «suspender cautelarmente, con efectos inmediatos (…), la negociación en las Bolsas de Valores y en el Sistema de Interconexión Bursátil de las acciones de Talgo S.A., y otros valores que den derecho a su suscripción, adquisición o venta, mientras es difundida una información relevante sobre la citada entidad». Sin embargo, a las 14:45, la CNMV levantó la suspensión de cotización de Talgo.
La cotización del fabricante de trenes abrió la jornada a un precio de 4,3 euros, con un comportamiento plano, pero a medida que se publicaban las informaciones relativas al veto del Gobierno, sus títulos comenzaron a caer repentinamente, hasta alcanzar los 4,26 euros, un 0,93% por debajo del cierre de la jornada anterior.
El veto de la OPA sobre Talgo
Así, el organismo encargado de evaluar las operaciones de adquisición de empresas españolas a raíz de una ley aprobada en plena pandemia para evitar que la caída en bolsa de las empresas fuese aprovechada por firmas extranjeras para tomar el control de empresas españolas ha decidido vetar la operación.
«El pormenorizado análisis llevado a cabo ha determinado que la autorización de esta operación conllevaría riesgos insalvables para la seguridad nacional y el orden público. En este contexto, el Consejo de Ministros ha declarado la información contenida en este expediente como clasificada», declara el Ministerio de Economía. «Para el Gobierno, Talgo es una empresa estratégica dentro de un sector clave para la seguridad económica, la cohesión territorial y el desarrollo industrial de España», afirma.
Tal y como explicó esté periódico, el Ejecutivo de Sánchez montó una propuesta de fusión con Talgo lanzada por la checa Skoda Transportation para poder vetar la OPA presentada por el grupo húngaro Ganz Mavag. Sin embargo, el Gobierno necesitaba que participase Criteria (el holding de La Caixa) para poder justificar su apoyo a la opción checa y el veto a la oferta húngara.
Nada más anunciar la mercantil húngara la operación tras llegar a un acuerdo con Trilantic sobre el precio, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, salió a decir públicamente que el Gobierno «hará todo lo posible» para frenar la OPA. Sus argumentos fueron que este grupo tiene participación pública controlada por el Gobierno «ultraderechista» de Viktor Orbán e incluso que podría haber inversores rusos detrás de la oferta.
El directivo de Magyar Vagon, András Tombor, fue asesor del gobierno de Orbán, lo que añade preocupación al Gobierno español. La Junta de Inversiones Extranjeras ha planteado razones de seguridad nacional para oponerse a la operación, argumentando que Talgo posee tecnología relevante para la movilidad militar en países europeos como los bálticos.
Las autoridades también tienen dudas sobre si las fábricas de Magyar Vagon en Hungría tienen la capacidad para resolver los problemas de producción de Talgo, lo que llevó al Ministerio de Transportes a inspeccionar esas instalaciones para ayudar en la toma de decisiones.
Ahora, el Gobierno veta definitivamente la OPA, justo después de que la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec) asegurara que estaba valorando recurrir la ley antiopas que permite suspender inversiones extranjeras, poniendo como ejemplo la injerencia del Gobierno sobre la operación de Talgo.
Los objetivos de Hungría
Tal y como reveló OKDIARIO, el Ministerio de Transportes de Hungría quería a Talgo para aprovechar la tecnología de alta velocidad española y ser capaces de competir con países como Alemania o Francia. En concreto, el Gobierno del país tiene en el foco el corredor que se está preparando entre París y Budapest, su capital, y consideraba que podía estar en condiciones de aportar trenes si tenía bajo su control la empresa española.
Además, el Ejecutivo húngaro prevé realizar otro gran corredor interno y creía que la tecnología española podía ser la clave para llevarla a cabo. Los responsables del país son conocedores de que España tiene la red de alta velocidad ferroviaria más extensa de Europa, con más de 4.000 km de infraestructuras.
Dávid Vitézy, quien fue secretario de Estado de Transporte de Orbán, aseguró cuando estaba en el cargo que la intención de Hungría era colaborar con los países de su entorno para desarrollar una amplia red de alta velocidad entre los países de la zona que ayudase a distribuir el grano ucraniano. En esas declaraciones, el político incluía a capitales como Praga o Varsovia.