El Gobierno espera que las agencias de calificación revisen al alza la solvencia de España
El ministro de Economía, Luis de Guindos, aclaró este martes durante un desayuno informativo que la separación de Cataluña es un problema artificial del que no le preguntan en Bruselas, pues ningún socio europeo cree que esta circunstancia pueda darse. Tan es así, que Guindos descarta tajantemente que ninguna agencia de calificación vaya a penalizar a España bajando su rating por un asunto que calificó como «una ensoñación». De hecho el ministro espera que las agencias de calificación mejoren la nota que dan a la solvencia de España.
En un tono más duro que el habitual y delante del CEO del Banco de Sabadell, Jaime Guardiola, afirmó que los promotores de la independencia saben que una Cataluña independiente quedaría automáticamente fuera de todos los tratados internacionales suscritos por Europa y de la propia UE. Cosa que no van a permitir el Gobierno entre otros motivos porque los catalanes no se lo merecen, afirmó el ministro.
Además, deberían imprimir una moneda propia (devaluada) pues no tendrían euro, al menos todos los bancos deberían cambiar su sede social para poder seguir operando con la moneda única y se perderían todos los fondos de ayuda europeos. «España no se entiende sin Cataluña y viceversa, sería nefasto para los dos como ya ocurre con el Brexit», afirmó categórico Guindos que acusó a las independentistas de mentir a conciencia pues saben que todo esto que él asegura es así y no exige discusión posible.
Recordó que si por algo se reconoce a Europa es por el Estado de Derecho por lo que no se debe ni plantear la vulneración no sólo de la Constitución española, sino del propio Estatut además de que las alternativas que ofrecen los secesionistas para Cataluña son menos prosperidad y más paro.
«Durante estos 600 años la relación entre España y Cataluña ha sido muy buena y no se entiende otro escenario. Ahora viene un tiempo en el que la economía nos va a dar grandes resultados si trabajamos juntos», comentó en un tono más apaciguador. Recordó que la decisión adoptada de «intervenir» los pagos de la Administración catalana se debe a que han incumplido la presentación de las cuentas a las que les obliga el FLA y que el Ejecutivo no descarta adoptar ninguna decisión pero se hará todo con prudencia, moderación y proporcionalidad.
Finalmente, defendió el proceso de intervención del Popular, por el que nadie pujó a un precio positivo afirmó, y aclaró que habrá una reducción del paquete que en la actualidad tiene el Estado en Bankia (67%) aunque no facilitó fechas.