según un estudio de Fedea

España ha recuperado hasta agosto sólo el 25% del empleo perdido desde el estado de alarma

España ha recuperado hasta agosto sólo el 25% del empleo perdido desde el estado de alarma
Yolanda Díaz, ministra de Trabajo.
Carlos Ribagorda

Cada vez más datos apuntan a que la recuperación económica en España no será en forma de ‘V’ y ni siquiera seguirá el ritmo de las economías de nuestro entorno. El mercado laboral español sólo ha recuperado hasta agosto el 25% del empleo perdido desde el 12 de marzo, cuando se cerraron los centros educativos -tres días después el Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias decretó el estado de alarma-, según un informe de Fedea publicado este martes.

Basándose en los datos de afiliación diaria de Empleo, Fedea destaca que entre el 12 y el 31 de marzo se perdieron en España 890.000 empleos. Entre esa fecha y el 30 de julio se habían recuperado 406.000 empleos, un 45% del total de lo perdido. Sin embargo, el 31 de julio, último día de mes, se perdieron 175.000 puestos de trabajo, reduciendo al 25% el porcentaje de empleo recuperado.

A esto hay que añadir los trabajadores que están en ERTE y los autónomos que están cobrando la prestación por cese de actividad. Sumando estos casos al total de parados, la tasa de desempleo se eleva al 22%, frente al 15% que muestra el dato oficial.

El ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, ha asegurado este martes que casi un millón de personas siguen en ERTE en la primera semana de agosto. El ritmo de reducción se mantiene respecto a julio en unos 32.000 diarios, por lo que el fin del estado de alarma y la temporada alta de turismo no ha mejorado la evolución. Los rebrotes, sin duda, han golpeado el sector más importante de la economía española. La OCDE ha advertido de que la economía española es la que presenta menos mejoría en julio de los países desarrollados.

En cambio, Fedea subraya en su informe que lo peor ha pasado y que se ha «tocado fondo». En su opinión, la recuperación ha empezado ya en el segundo trimestre al subir el índice de actividad global del PIB.  Sí destaca la mala evolución de sectores como el turismo y subraya que la recuperación en este sector está «seriamente amenazada» en las últimas semanas por el rebote de la tasa de contagios y las restricciones impuestas por algunos importantes países emisores de turistas a los viajes a España.

Larga duración

Además de la pobre tasa de recuperación del empleo perdido pese al fin del estado de alarma, Fedea pone el acento en un histórico problema del mercado laboral español: la precariedad, que no ha sido resuelta por Sánchez después de dos años en el Gobierno y pese a sus críticas a Mariano Rajoy. «Al igual que en anteriores crisis económicas, vuelve a reproducirse uno de los problemas socialmente más costosos y más difíciles de resolver», asegura Fedea.

El número de parados de larga duración -más de un año- ha crecido en 208.000 desde febrero, un 16,8%, mientras el paro de corta duración ha caída notablemente. La evolución en julio, primer mes completo sin estado de alarma y sin restricciones a la movilidad, es similar. Entre junio y julio, el paro de corta duración ha caído en 133.000 personas, mientras que el de larga duración ha aumentado en 43.000 personas. Los parados con duración entre 3 y 6 meses son los que más han caído (154 mil personas).

La evolución de la precariedad laboral actualmente deja en papel mojado las críticas de Sánchez a Rajoy acerca de los contratos temporales y pone el foco en las características propias del mercado laboral español.

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