Otro batacazo de Luis Enrique en Champions: al Liverpool le vale un sólo tiro a puerta para ganar al PSG

El PSG de Luis Enrique ha sufrido otro batacazo en Europa la noche de este miércoles en la Champions League. El conjunto parisino perdió por la mínima (0-1) ante el Liverpool de Arne Slot tras encajar un inesperado gol de Harvey Elliot en el minuto 86.

El tanto del jugador inglés hizo saltar por los aires el planteamiento del ex entrenador del Barcelona en el Parque de los Príncipes en el partido de ida de los octavos de final del máximo torneo continental. Y es que el resultado es bastante engañoso para los aficionados que hayan visto el partido, pues el PSG dominó el encuentro de principio a fin. El centro del campo fue parisiense y también de ellos las mejores ocasiones del primer tiempo, en el que merecieron más rédito de su esfuerzo con el que anularon a los ingleses.

🎯 Ni un minuto en el campo… Y PARA LA JAULA.

Harvey Elliott adelanta al Liverpool en París con el primer balón que toca. #UCL #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/uMTPl1Qwvi

— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) March 5, 2025

Y es que el conjunto de Luis Enrique se adueñó de la posesión del balón y tuvo numerosas ocasiones, concretamente 27 disparos. Incluso el PSG parecía haber logrado la recompensa a tanta insistencia en el minuto 20, cuando Kvaratskhelia aprovechó bien un rechace al saque de un córner para sacarse un buen disparo cruzado que se coló por el palo largo del Liverpool. Pero el VAR detectó un milimétrico fuera de juego que mantuvo las tablas.

Por su parte, el Liverpool solo necesitó de dos ocasiones (un tiro a puerta) para llevarse el partido y regresar a Inglaterra con ligera ventaja en la eliminatoria. El premio les llegó a los pupilos de Slot cuando nadie lo esperaba, cuando todo el Parque de los Príncipes esperaba la traca final de su equipo y llegó el único desajuste defensivo, en el que Darwin Nuñez ganó un duelo aéreo a Marquinhos que permitió a Elliott lograr un precioso botín.

La maldición del PSG en Europa

La maldición volvió a cebarse con el PSG, que recuperó la imagen de hace unos meses, cuando todo su despliegue ofensivo quedaba en nada por la falta de acierto. Esta vez fue un inspirado Alisson quien les privó del premio que buscaron con ahínco y que, seguramente, merecieron.

La apuesta de Luis Enrique por un equipo sin estrellas de alto nivel volvió a la casilla se salida, tras cuatro meses sin conocer la derrota, cuyo sabor volvieron a probar de nuevo contra un gran rival, como sucedió el pasado mes de noviembre pasado ante al Bayern Múnich.

Sin embargo, este resultado fue más cruel ahora, porque la racha de 22 partidos invictos del PSG había alimentado el sueño, que ahora pasa por una gesta la semana próxima. El proyecto de Luis Enrique queda tocado porque volvió a estrellarse contra un rival de nivel y en Anfield se jugará buena parte de su crédito, aunque su puesto no parece peligrar.