AL KASS INTERNATIONAL CUP

El Juvenil C de Álvaro Benito se exhibe y se planta en la final (1-3)

Álvaro Benito
El Juvenil C del Real Madrid celebra un gol. (Al Kass International Cup)
Iván Martín

El Juvenil C del Real Madrid venció al Eintrach de Frankfurt en la semifinal del Al Kass International Cup por 1-3. Los blancos tuvieron un gran comienzo, donde se pusieron 0-2 en 11 minutos. Después, los alemanes reaccionaron y plantaron batalla. Altube, portero madridista, y Sanse fueron los mejores jugadores del tercer juvenil.

La escuadra de Álvaro Benito salía muy metida en el partido. Al igual que le sucedió en cuartos de final, los blancos querían mandar desde los primeros minutos. Y en esta ocasión, el premio llegó mucho antes. Sanse se adelantaba a todos los defensas alemanes para contactar en el primer palo con un esférico que besaba las redes. Con el viento a favor, Benjamín Garay ponía el 0-2 tras un cabezazo a la salida de un córner lanzado por Miguel Baeza. 11 minutos de contienda y parecía que el Madrid lo tenía todo como quería. Pero aún quedaba mucho por jugar.

El Eintracht sacaba de centro, montaba el ataque y la jugada terminaba en penalti. Oportunidad clara para recortar distancias, si no fuera porque Altube iba a seguir mostrando sus buenas dotes bajo palos parando la pena máxima. Respiraba el Madrid y cerca estuvo de cerrar el partido si otro cabezazo de Garay no se hubiese topado con el poste. Pero tras esta acción, la escuadra de Frankfurt empezó a dejar claro que se merecía estar en semifinales. Las acometidas germanas empezaron a ser constantes y Altube comenzó a opositar para ser nombrado mejor jugador del partido. El meta madridista salvó los muebles en varias ocasiones.

Una vez sofocado el chaparrón, el Juvenil C volvió a calmar la contienda, aunque ya nunca más mostraría esa superioridad vista en los primeros 10 minutos. Los dos equipos entraron en un toma y daca donde los porteros fueron protagonistas para evitar algún gol más en el primer periodo.

Sufrir para vencer

La segunda mitad comenzaba con el Madrid en busca de un tercer gol que cerrase el partido. Miguel Baeza estuvo cerca de hacerlo con un saque de esquina directo que se topó con el palo. Fue el primer aviso de tercer juvenil madridista. Mientras, el Eintracht trataba de generar ocasiones que le permitieran recortar la distancia. Y fue aquí donde los hermanos Kabuya, dos gemelos que juegan muy bien al fútbol, empezaron a hacer diabluras. En estas, William, uno de los hermanos, aprovechaba un gran pase para ganar a Garay y hacer el 2-1. Recortaba distancias los alemanes. Pudo ser peor si minutos después el propio William hubiese hecho buena una asistencia de su gemelo, pero su disparo se marchó al palo.

El partido iba alcanzado los minutos de la verdad y el Madrid sufría, lo que provocó la reacción de Álvaro desde el banquillo. El entrenador salmantino dio entrada a Álex y el resultado no pudo ser mejor. Tras comenzar a coger las riendas, llegaría el gol de la tranquilidad. Álex hacía una gran jugada que finalizaba con un lanzamiento que repelía el meta alemán, pero el rechazo caía en las botas de Dani y éste no dudó en fusilar para hacer el 1-3 definitivo.

Tras la victoria, el Juvenil C del Real Madrid alcanza la final del torneo internacional de Al Kass por segundo año consecutivo. El próximo martes a partir de las 16:15 horas disputarán la final ante el vencedor de la otra semifinal, que mide a la Academy Aspire y al Salzburgo.

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