Hamilton-Rosberg, guerra total en Mercedes

Tan solo dos carreras han tardado Lewis Hamilton y Nico Rosberg en volver a tener un encontronazo en la pista. El ridículo del Gran Premio de España, donde ambos Mercedes acabaron fuera de carrera en la primera vuelta de la carrera, parece no haber aplacado los ánimos de ambos pilotos, que volvieron a encontrarse en Canadá. Salían en primera fila con Hamilton por delante. Sin embargo, el inglés hizo una salida muy mala, mientras que Rosberg arrancó algo mejor. Superados ambos por Vettel, llegaron en paralelo a la primera frenada, donde Lewis tenía el interior. Obviamente, el actual campeón no cedió ni un ápice, algo que tampoco hizo el germano. ¿El resultado? Toque entre ambos y Rosberg a la escapatoria.

¿Se puede culpar a alguien por esta maniobra? En OKDIARIO creemos que no. Es un simple lance de carrera. Hamilton iba por el interior y fue muy agresivo defendiendo su posición. Rosberg, por fuera, trató por todos los medios de superar a su compañero, sabiendo que llevaba todas las de perder, máxime teniendo en cuenta de que éste no es precisamente de los que levantan el pie ante situaciones de riesgo. Desde aquí solamente podemos aplaudir la valentía de ambos, porque son situaciones como ésta donde todos dan el máximo cuando los aficionados disfrutamos. Y también debemos alabar a Mercedes por permitir que se den estas situaciones, si bien no parece lo más inteligente como equipo. Teniendo en cuenta el historial entre Hamilton y Rosberg, los de la estrella harían bien en aleccionar a sus pilotos.

Al final de la carrera Nico Rosberg dejó claro su descontento con la situación que se había generado. “Es cierto que Vettel tuvo una gran salida, pero la mía fue decente y la de Lewis muy mala. Mi posición estaba en el exterior de la curva, pero él hizo una maniobra demasiado dura, nos tocamos y yo acabé fuera. Estoy bastante molesto, pero así son las carreras y mi trabajo es asegurarme de estar delante en la próxima batalla”.

Hamilton no se ve culpable del incidente

Hamilton, por su parte, habló desde la tranquilidad de quien ha ganado la carrera. “Tenía subviraje y Nico estaba muy cerca. No fue intencionado, y por suerte mi coche no quedó dañado”. La explicación de Lewis convenció a todos, ya que los comisarios ni siquiera consideraron oportuno investigar el accidente.

El papelón del fin de semana le correspondió una vez más a Toto Wolff, mandamás del equipo alemán, que tuvo que dar la cara ante los medios de comunicación, donde no se mostró especialmente contento ante un nuevo incidente entre sus pilotos. “Fue una maniobra difícil. Lewis dijo que tenía subviraje. Desde la perspectiva del equipo, si empiezas la carrera primero y segundo y en la primera curva se tocan los dos y uno regresa noveno no es algo agradable”. Y así, hasta la próxima.