La cuesta abajo compartida por Barça y Juventus
Dos gigantes heridos y aturdidos, aferrados a grandes recuerdos no tan lejanos que pretenden agarrar y devolver al presente inmediato. Eso son Barcelona y Juventus. Cruzarán sus caminos en la madrugada del martes al miércoles (2.30 hora española) en el Cotton Bowl de Dallas. Grandes fichajes para enderezar la historia. Obras de reconstrucción en territorio estadounidense.
El Barça atraviesa un extraña euforia bañada en millones y alimentada por la victoria en el Clásico ante el Real Madrid. Joan Laporta prometió devolver la ilusión a la parroquia culé y, palanca a palanca, va pergeñando un proyecto deportivo tan pujante sobre el césped como peligroso en las oficinas. La apuesta es a largo plazo, concretamente a 25 años, y ahora mismo todo son risas y abrazos en el Camp Nou. El tiempo decidirá si esta enloquecida visita al casino es ganadora; mientras tanto, que cunda la alegría.
A la espera de que también lleguen refuerzos en defensa, Xavi Hernández sabe que tiene mimbres para conformar un ataque temible. Raphinha, autor de dos goles y dos asistencias en dos partidos, se ha convertido en la sensación de la pretemporada culé y Lewandowski ya dejó pinceladas de su calidad en su debut. Ansu Fati es el otro gran ‘fichaje’ veraniego del Barcelona.
En medio de una catarsis similar, aunque mucho menos arriesgada financieramente, se encuentra la Juventus. El equipo que dominó con mano de hierro la Serie A durante la cifra récord de nueve temporadas consecutivas lleva dos sin reinar, apartada del trono primero por el Inter y el pasado curso por el AC Milan. Ni siquiera estuvo de cerca del título en ambas ocasiones.
Di María, Pogba… y Vlahovic
La Vecchia Signora ha tirado de veteranía para fichar en este mercado a Ángel di María, que completa un espectacular historial de grandes clubes europeos, y a Paul Pogba. En el caso del francés, ha repetido la misma jugada que le salió bien hace una década: traérselo gratis tras expirar su contrato con el Manchester United.
Sin embargo, el jugador llamado a liderar a la Juventus en los próximos años es Dusan Vlahovic. El serbio protagonizará un duelo muy interesante con Lewandowski, ya que seguramente es el ariete joven más parecido al polaco -con permiso de Haaland- en el fútbol europeo: ambos son poderosos físicamente y letales en el área. Ambos comparten la misión de reflotar a dos grandes clubes.