Dos Balones de Oro de blanco y un tercero en camino

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Cristiano muestra a la afición su segundo Balon de Oro como madridista. (Getty)
Nacho Atanes
  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

La historia de Cristiano Ronaldo con el Real Madrid está llena de éxitos, pero centrándonos en el ámbito individual cuenta hasta el momento con dos grandes picos, los dos galardones de Balón de Oro logrados por el luso en los años 2013 y 2014 darán paso, salvo sorpresa mayúscula, a su tercer trofeo dorado como jugador madridista, el cuarto en su carrera profesional, que vendrá de la mano de una renovación más que merecida con el club que le ha convertido en historia.

Su primer Balón de Oro, logrado en 2008 con la camiseta del Manchester United, representó la confirmación para el Real Madrid de que debía lanzarse a por uno de los mejores jugadores de la actualidad, que llevaba años siguiendo, y que tenía en su juego y personalidad ganadora el ADN del equipo merengue. El 11 de junio de 2009 se confirmó una operación astronómica que traía al luso al Madrid a cambio de 94 millones de euros, una cifra récord que con el paso de los años se ha convertido en una auténtica ganga.

El Balón de Oro de 2013 devolvió a Cristiano Ronaldo a lo más alto del podio del premio después de dos temporadas en las que se tuvo que conformar con la segunda posición. El luso no pudo aderezar con títulos su sobrenatural actuación individual, que, gracias sobre todo a un final de año diferencial, le otorgó el premio que habilita al mejor jugador del mundo en la temporada.

Al año siguiente, en 2014, con la Champions League –récord goleador incluido– y la Copa del Rey bajo el brazo, no había demasiadas dudas de que Cristiano repetiría galardón. Sus cifras goleadoras así lo refrendaban y el premio volvió a llenarle de emoción y satisfacción por el éxito logrado. El grito del siiiiiuuuhh copó las portadas, pero lo verdaderamente importante era volver a ver teñida de dorado la figura de uno de los grandes jugadores de la historia del Madrid. 

Ahora, en 2016, el premio no se le puede escapar a Ronaldo. Su gran temporada, en la que ha callado a sus detractores con goles y actuaciones de leyenda como la lograda frente al Wolfsburgo en cuartos de final de la Champions, se han unido a la conquista de la Undécima con el Madrid y la primera Eurocopa de la historia de Portugal, monopolizando los dos grandes títulos de la temporada a nivel de clubes y selecciones.

Cristiano es el gol

Los goles y el liderazgo son los dos grandes argumentos que explican que Ronaldo haya sido, junto a Lionel Messi, el protagonista de los premios al Balón de Oro desde 2008. El crack luso ha superado los 50 goles por temporada en las seis últimas temporadas con el Real Madrid, algo que le envía directo al debate sobre si se trata del mejor goleador de la historia del fútbol.

Estas cifras tienen un mérito doble, ya que Cristiano no es un delantero al uso, sino que su posición de partida, como extremo izquierdo, teóricamente debería alejarle de la portería rival, pero su hambre y su calidad permiten que las situaciones de gol para el luso aparezcan a montones en cada encuentro.

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