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El City conquista la Premier de infarto con una remontada exprés

El Manchester City remonta un 0-2 en seis minutos ante el Aston Villa para ganar la Premier League, evitando que el Liverpool le levante el título

Las lágrimas de Guardiola tras rozar un nuevo fracaso en el City

El Manchester City remonta en seis minutos un 0-2 del Aston Villa para salvar otro fracaso de Pep Guardiola. El conjunto mancuniano salvó los muebles a última hora para proclamarse campeones de la Premier League. El Liverpool, obligado a ganar y a esperar, se vio durante gran parte del partido como potencial campeón, pero vio en los últimos instantes de la jornada como el alirón era imposible, pese a imponerse 3-1 al Wolverhampton.

No comenzaron las cosas bien en Anfield. El Liverpool necesitaba ganar y esperar un tropiezo de los de Guardiola para llevarse el título, pero comenzaron perdiendo. Sorprendieron los Wolves con un gol de Pedro Neto en el minuto 3 de partido. En esos momentos podía haber aprovechado el City para ponerle el lazo a la Premier, pero el Villa de Gerrard aguantaba en Mánchester.

Sadio Mané igualó el marcador en Liverpool a los 24 minutos y el gol de Cash en el Etihad que adelantaba a los villanos dejaba al finalista de la Champions a un gol de conseguir el triplete de Inglaterra, puesto que ya han ganado la FA Cup y la Copa de la Liga. Conscientes de que un gol les separaba de la Premier, convirtieron el encuentro en un asedio, pero el gol se resistía.

El Manchester City estaba apoderado de un miedo escénico similar al que le privó en el Bernabéu de meterse en la final de París. Y eso lo aprovechó de nuevo el Aston Villa, con un estelar Coutinho, que puso el 0-2. El ex del Barça –y del Liverpool– ha renacido en su aventura en la Premier y en la última jornada servía para poner en bandeja el título del que fuera su equipo.

Pero el gol se resistía en Anfield. Sin Thiago, que se retiró por lesión, Klopp tuvo que tirar de Salah, que estaba entre algodones pero salió en la recta final para dar el empujón definitivo. Se resistía el gol del alirón de los reds –a los que les habían anulado uno de Mané por fuera de juego– lo que daba alas al City para seguir confiando, puesto que todavía se mantenían en el primer puesto. Por medio de Gundogan se acercaban en el marcador y, cinco minutos después lograban ponerse por delante, por medio de Rodri y, de nuevo, el mediocentro alemán.

La victoria skyblue dejaba sin opciones a un Liverpool que, en los minutos finales lograba la victoria, por medio de Salah y de Robertson. Pero ya era tarde. Necesitaban un nuevo milagro desde Mánchester que, esta vez, no llegó. Los citizens se llevaron el octavo título liguero de su historia, después de una remontada en seis minutos.