Alejandro Blanco: «Es un orgullo que los deportistas españoles hayan sido un ejemplo durante el coronavirus»

La pandemia se ha llevado por delante todo tipo de eventos previstos para 2020. Los Juegos Olímpicos no habían vivido una suspensión desde la Segunda Mundial y hubo meses que el movimiento olímpico vio como imposible la celebración de su evento estrella en Tokio. Finalmente, en 2021 habrá Juegos y parece que una gran normalidad para las circunstancias que vivimos. La única duda, a juicio del presidente del Comité Olímpico Español Alejandro Blanco, reside en la presencia de público.

«Todo está asegurado, deportistas, técnicos, federaciones y hasta periodistas… La única duda es si veremos público o no en las gradas. Nadie tiene la certeza exacta de eso. Depende de cómo evolucione la pandemia hasta el mes de julio. Yo creo que va a haber público, pero no en la medida de antes. Hay que esperar para saber si habrá vacunación. El COI y la OMS tomarán la mejor decisión para todos», resume el presidente del COE, una de las personas más cercanas al presidente del movimiento olímpico, Thomas Bach.

En una entrevista con OKDIARIO, Blanco exhibe un discurso prudente y hasta bromea con que «ahora estamos a otras cosas» cuando antes de la pandemia el debate era si vendría un abanderado o otro. «Afortunadamente se ha decidido que haya un abanderado chico y otro chica para cada país. El COI está buscando fomentar la paridad y me parece una medida extraordinaria para reconocer el esfuerzo de todos y cada uno de los deportistas», admite.

España, sin embargo, no se está subiendo a una moda pasajera del deporte femenino ni nada similar, como reconoce Blanco. El presidente saca pecho al reconocer el papel de la mujer en el movimiento olímpico español y mientras internacionalmente buscan que haya un 50-50 en cuanto a representantes olímpicos, esa situación ya está conseguida por España y con resultados impresionantes.

«Hay un dato importantísimo y es que en los últimos Juegos en Río el 68% de las chicas que fueron a Brasil volvieron con medalla o diploma olímpico. Ese es un dato que no lo tiene ningún país del mundo. Por eso digo que nosotros vamos un paso por delante», se enorgullece.

A Blanco, como veterano en el cargo de presidente, no le gusta hacer pronósticos sobre las posibles medallas y menos en un año tan incierto tras la pandemia. Eso sí, advierte que el COE hace previsiones internas de medallas y que han acertado en el número en las últimas dos ediciones olímpicas. «Ya sabes que no hablo de medallas, sí de posibilidades. Ahora mismo no sabemos cómo están nuestros deportistas y no sabemos cómo está el nivel del deporte, de los otros deportistas, de otros países. El deporte no es una ciencia exacta, pero cuando se acerque la cita sabremos más cosas porque quedan todavía muchos clasificatorios que no se han celebrado». El presidente del COE admite cierta preocupación por la anulación de algunos eventos previstos para estas fechas por la Covid-19.

Nos darán alguna sorpresa

El presidente del Comité Olímpico Español admite que este aplazamiento va a cambiar la forma de pensar de algún deportista que tenía planeado retirarse en Tokio. «Pero si París 2024 está ahí al lado y lo saben», dice con sorna. Blanco no quiere desvelar nombres ante la que presuntamente iba a ser la última cita de una generación de medallistas inolvidables como Rafa Nadal, Pau Gasol, Mireia Belmonte o Saúl Craviotto.

«Harán una jornada de reflexión. No creo que dure más de un día o dos, porque cuando se quieran dar cuenta ya estaremos en París. Tu piensa que tienes el periodo de descanso, te metes ya en el 22 y resulta que en el 24 estás compitiendo en París. Entonces alguno de aquellos deportistas que pensaban que estos iban a ser sus últimos Juegos, pues no van a ser sus últimos Juegos», reflexiona el presidente, quien tampoco desvela si él seguirá en el cargo, aunque dispone del apoyo pleno de las federaciones olímpicas españolas.

Preguntado por si veremos los mejores Juegos de la historia, Blanco tiene claro su pronóstico de que nada superará lo visto en Pekín 2008. «Es que no deben entrar en la comparación con nadie por los medios que pusieron». El mandatario gallego, sin embargo, sí cree que estarán «mejor organizados» y que sobretodo serán «más sostenibles». «He ido muchas veces a Tokio. Conozco la mentalidad japonesa. Harán unos Juegos que en cuanto a organización es perfecta. La historia es que tienen menos presupuesto porque así se acordó y China hizo una inversión incomparable en aquel momento».

Reconciliar al deporte español

Blanco ha adquirido con el paso del tiempo un papel de mediador en todos los conflictos que ha vivido el deporte español, pese a que él mismo se ha visto envuelto en diversas polémicas con el Consejo Superior de Deportes. «No voy a entrar en polémicas. Yo no compito con nadie y mi teléfono está abierto las 24 horas del día. Mi historia es ayudar a los deportistas», admite el mandatario, quien ha vivido un encontronazo con el CSD a cuenta del mantenimiento de las becas ADO y sus condiciones. «Todo eso está resuelto y asegurado. Los deportistas lo tendrán todo», indica, al tiempo que agradece a UCAM Murcia, Telefónica y la Fundación Trinidad Alfonso su implicación con el deporte olímpico.

Para evitar esa dependencia estatal, Blanco tiene claro que «lo que hay que intentar es que cada vez haya más dinero privado que venga al deporte, que ayudemos a aquellas empresas a invertir en deporte y devolverles eso con visibilidad y resultados. Entonces creo que ese es un camino que cada vez más se debe ser priorizar en el dinero privado para desarrollar al deporte español».

Blanco tiene claro que la guerra Rubiales-Tebas en el fútbol español tiene un fácil arreglo. «La solución no es complicada. Que cada uno cumpla sus competencias. Nada más», dice el mandatario, quien ve posible que ambos dirigentes puedan convivir. «Hay más puntos de entendimiento que hace dos años. Hay que encontrar soluciones en aquellos puntos donde haya roces entre ambas partes. No creo que eso sería bueno para el fútbol y el deporte español un clima tenso».

Para terminar la entrevista, Blanco bromea sobre las mil y una anécdotas que los deportistas le han contado durante el confinamiento. «Podría escribir un libro de 1.000 maneras de entrenar durante el coronavirus, pero me quedo con otras cosa: con su responsabilidad. Me llegaron al corazón las historias de deportistas que podían salir a entrenar durante la pandemia y que no lo hicieron por responsabilidad y solidaridad con la sociedad, pese a que el riesgo de contagio era cero. Los deportistas se han convertido en más ejemplo durante esta situación y eso enorgullece a uno».