El alcalde de Río culpa al comité organizador de los JJOO por los «gravísimos problemas» de la villa

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El alcalde de Río, eduardo paes (dcha). junto al presidente del CIO, Thomas Bach (centro) y el presidente del Comité Organizador, Caros Arthur Nuzman. (AFP)

En todas las ediciones de los Juegos Olímpicos, los días antes, los medios fijan su atención en los problemas y desajustes en las instalaciones, en la organización o en la gestión. Pero suelen quedar ahí, porque llegan los días de competición y todo se olvida. El caso es que en Río de Janeiro los problemas son mucho mayores de lo normal: las aguas insalubres, el zika… y las instalaciones de la Villa Olímpica, en algunos casos inhabitables. Este viernes, a una semana de que se inauguren los JJOO de Río 2016, el alcalde de la ciudad anfitriona ha cargado contra el comité organizador por los «problemas gravísimos de gestión» en estas edificaciones.

Eduardo Paes, primer edil de la ciudad carioca, ha acusado al comité presidido por Carlos Arthur Nuzman de un «problema gravísimo de gestión» de la Villa Olímpica, en una entrevista que rompe con la solidaridad observada hasta ahora entre las dos partes.

«La Villa Olímpica estaba lista y durante los tres meses en que pasó bajo el control del comité organizador [Rio-2016], hubo un problema gravísimo de gestión. Durante tres meses aquellos apartamentos fueron invadidos y se robaron muchas cosas», indicó el edil carioca en una entrevista al diario O Estado de Sao Paulo.

«Las puertas quedaron semiabiertas; hubo una falta de atención del comité organizador, objetivamente», añadió, antes de detallar los objetos que según dijo fueron robados como lámparas e inodoros.

Según varios medios de comunicación brasileños, los problemas en la Villa Olímpica habrían sido causadas por obreros descontentos con los retrasos por sus pagos salariales.

Al menos 15 inmuebles de 31 presentaban problemas de fontanería, que iban de fugas de agua o baños taponados por bloques de cemento, el domingo en la inauguración oficial de la Villa de los deportistas, lo que condujo a la delegación australiana a un boicot hasta el martes.

Unos 630 fontaneros fueron contratados de urgencia para arreglar los problemas, todos resueltos el jueves según Rio2016. Sin embargo, el Ministerio de Trabajo ha denunciado irregularidades en las condiciones de trabajo de estos obreros de refuerzo.

«Nunca nos advirtieron en las tres reuniones semanales»

El alcalde Paes ha lamentado también que la alerta sólo fuera dada «el jueves de la semana pasada», y que el problema no fuera «nunca» evocado en las tres reuniones semanales entre las partes responsables de la preparación de los Juegos.

«Fue un error inaceptable, es una pena porque fue en el pistoletazo de partida de los Juegos», añade el alcalde. «No había ningún brasileño en la dirección de la Villa Olímpica, sólo extranjeros. Al menos, no se dirá que los brasileños son desorganizados. El jefe era Mario Cilenti».

Cilenti, el director ejecutivo de la argentino de la Villa habría sido apartado de su puesto, según la prensa brasileña, sin confirmación de Rio-2016. Consultado por la AFP, el comité de organización presidido por Carlos Nuzman no comentó a las declaraciones de Paes.

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