Tu dinero en peligro: la estafa de los datáfonos que pone en peligro a toda España
En plena era digital, el pago sin contacto o contactless se ha convertido en una opción ampliamente utilizada por millones de personas en todo el mundo. Basta con acercar la tarjeta, el móvil o un dispositivo inteligente a un datáfono, para que la transacción se complete en cuestión de segundos. Además, para compras de pequeñas cantidades, ni siquiera es necesario introducir el PIN. Sin embargo, a pesar de la comodidad y la rapidez que ofrece este sistema, los fraudes relacionados con él han aumentado a un ritmo alarmantes, hasta el punto de que las autoridades se han visto obligadas a alertar de la estafa de lo datáfonos.
En los últimos meses, han surgido casos de personas que descubren cargos en sus cuentas sin haber realizado ninguna compra o haber facilitado sus datos a terceros. Los estafadores han encontrado la manera de aprovechar el sistema contactless para robar dinero sin que las víctimas siquiera se den cuenta. Utilizando datáfonos en lugares concurridos, hacen cobros sin autorización, simplemente acercando el dispositivo a la cartera el bolsillo de la víctima.
Así funciona la estafa de los datáfonos
La evolución de los métodos de pago ha revolucionado la manera en que realizamos nuestras compras. Desde las tarjetas con banda magnética hasta las opciones biométricas más modernas, la seguridad ha sido siempre una prioridad en la industria bancaria. No obstante, con cada avance tecnológico también surgen nuevas vulnerabilidades que los delincuentes buscan explotar.
El contactless ha sido una de las innovaciones más importantes de los últimos años. En la mayoría de los países, las transacciones realizadas con este sistema tienen un límite por operación que oscila entre 20 y 50 euros sin necesidad de introducir el PIN. Los delincuentes han encontrado maneras de aprovecharse de esta característica realizando múltiples cobros en un corto periodo de tiempo o usando diferentes datáfonos para extraer cantidades significativas de dinero antes de que la víctima se de cuenta
Modus operandi
El método que utilizan los ciberdelincuentes para llevar a cabo la estafa de los datáfonos es sorprendentemente simple y efectivo. En primer lugar, los consiguen un datáfono, un dispositivo de pago que se puede adquirir de forma legal en diversos comercios o a través de proveedores de servicios financieros.
Una vez tienen el dispositivo, lo configuran para cobrar pequeñas cantidades de dinero. Posteriormente, se dirigen a lugares concurridos como estaciones de metro, autobuses, centros comerciales o incluso bares y restaurantes. Allí, pasan discretamente el datáfono cerca de los bolsillos, mochilas o carteras de las víctimas que llevan tarjetas con tecnología contactless. El cobro se procesa en segundos y la víctima no se da cuenta del robo de inmediato, ya que no recibe notificaciones ni alertas a menos que revise su cuenta bancaria.
En otros casos, los estafadores han implementado una técnica más elaborada: utilizan dispositivos modificados para robar los datos de la tarjeta durante la transacción. Posteriormente, emplean esta información para realizar compras online o clonar tarjetas y efectuar retiros de efectivo en cajeros automáticos.
Las autoridades y expertos en ciberseguridad han emitido múltiples alertas sobre la estafa de los datáfonos, especialmente en grandes ciudades donde el contacto cercano entre personas es inevitable.
En países como España, Reino Unido y Francia, se han reportado numerosos casos en los que las víctimas detectaron movimientos extraños en sus cuentas bancarias sin haber perdido sus tarjetas ni haber facilitado sus datos personales.
Las entidades bancarias han reforzado sus sistemas de seguridad implementando notificaciones en tiempo real y permitiendo a los usuarios establecer límites de gasto en pagos sin contacto. Sin embargo, la responsabilidad principal sigue recayendo en los usuarios, quienes deben tomar medidas para protegerse de este tipo de robos.
Cómo protegerse
Si bien el pago contactless es seguro en la mayoría de los casos, es recomendable adoptar ciertas precauciones para minimizar el riesgo de ser víctima de fraude:
- Utilizar carteras o fundas con protección RFID: existen carteras y fundas diseñadas con materiales que bloquean las señales de radiofrecuencia. Estas impiden que un datáfono pueda leer la tarjeta sin el consentimiento del usuario.
- Activar alertas de transacciones en el banco: muchas entidades ofrecen la opción de recibir notificaciones instantáneas cada vez que se realiza un pago con la tarjeta. Esto permite detectar de inmediato cualquier transacción sospechosa.
- Establecer límites de gasto para pagos sin contacto: algunas entidades permiten configurar un monto máximo para transacciones contactless o incluso desactivar esta función desde la aplicación móvil del banco.
- Revisar periódicamente los estados de cuenta: es recomendable comprobar con frecuencia las transacciones bancarias y reportar cualquier movimiento sospechoso de inmediato.
La evolución tecnológica ha traído consigo múltiples beneficios, pero también ha abierto nuevas oportunidades para los ciberdelincuentes. El pago contactless es una herramienta cómoda y eficiente, pero su mal uso puede representar un riesgo para los usuarios desprevenidos. Protege tu dinero, protege tu información y protege tu tranquilidad.