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Castilla-La Mancha

Día de Castilla-La Mancha: ¿por qué se celebra hoy, día 31 de mayo?

El 31 de mayo es el día de Castilla-La Mancha. Tal día como hoy del año 1983, se constituyeron las primeras Cortes de Castilla-La Mancha.

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El 31 de Mayo se celebra el Día de Castilla-La Mancha un día festivo en esta comunidad autónoma que conmemora la constitución de sus primeras Cortes pero además, celebra también el patrimonio cultural de la región, que es rico en la historia de los íberos, celtas, visigodos, romanos y todos los demás que han vivido en la región en los últimos dos mil años. Descubramos el origen de este día y por qué se eligió la fecha del 31 de mayo para su celebración.

Día de Castilla-La Mancha el 31 de mayo

El 31 de mayo es el día de Castilla-La Mancha. Tal día como hoy del año 1983, se constituyeron las primeras Cortes de Castilla-La Mancha en la iglesia toledana de San Pedro Mártir. Ante la amenaza de una posible absorción a Madrid, unos años antes se sentaron las bases para poder disfrutar de una plena autonomía. En este día tan especial se celebra una victoria, el triunfo de una reivindicación que culminó con el nacimiento de las primeras Cortes, la comunidad autónoma era una realidad.

Orígenes del día de Castilla-La Mancha

Las primeras Cortes fueron el final de un proceso que se empezó a gestar unos años antes. El 26 de abril de 1976 en Mota del Cuervo se reunieron un grupo procuradores a Cortes por Albacete, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo para sentar la base de la futura comunidad autónoma de Castilla-La Mancha.

El deseo de alzarse frente al resto de comunidades históricas, tener voz propia y no perder la oportunidad de crecer expandirse y desarrollarse, motivó a una serie de políticos y a la ciudadanía entera a aprovechar la oportunidad de ganar su lugar en el nuevo mapa de España. La renuncia de Albacete a Murcia allanó un camino que se acabó materializando más rápido de lo que se esperada.

De este modo, Castilla-La Mancha inició su camino para convertirse en una región autónoma el 15 de noviembre de 1978, cuando el gobierno central español definió varias regiones autónomas diferentes en todo el país.

El 3 diciembre de 1981 un total de 158 futuros castellano-manchegos, entre senadores y diputados por la cinco provincias, acabaron de redactar el Estatuto de Autonomía regional. Se aprobó el 10 de agosto de 1982 y entró oficialmente en vigor el 17 de agosto de 1982.

El debate quedó abierto sobre dónde ubicar la capital de la nueva comunidad autónoma. Hoy en día, el Estatuto sigue sin plasmar que Toledo es la capital regional. Los servicios autonómicos quedaron divididos entre Albacete, Toledo y Cuenca. Ciudad Real también obtuvo un peso importante.

A pesar de ello como el último día de mayo de 1983 se constituyeron las primeras Cortes de Castilla-La Mancha elegidas por los ciudadanos, este memorable evento hizo que el 31 de mayo se convirtiera en Fiesta Regional. Esta fiesta se celebró por primera vez en 1984 y se ha celebrado todos los años desde entonces.

Cómo se celebra el Día de Castilla-La Mancha

Dado que es un día festivo autonómico, las escuelas y los edificios gubernamentales de este martes Día de Castilla-La Mancha están cerrados , al igual que muchos negocios. El día está marcado con una variedad de eventos que incluyen la entrega de las Medallas de Oro de la Región y la entrega de Insignias al Mérito Regional.

Además, se celebran demostraciones de arte y artesanía local, comidas de comunidades, eventos deportivos, conciertos de música tradicional y moderna, películas producidas localmente, obras de teatro, degustación de vinos y presentaciones culturales especiales.

Dado que Toledo se encuentra próxima a Madrid, es probable que muchas personas opten por visitar Castilla-La Mancha en un solo día o, incluso, planifiquen una escapada a esta ciudad, que es posiblemente la más renombrada de toda la comunidad y ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Entre sus joyas se encuentra la imponente Catedral de Toledo del siglo XIII, que acoge un impresionante altar mayor de estilo barroco, el célebre El Transparente y obras de El Greco; la Sinagoga de Santa María la Blanca, erigida en el siglo XII durante el reinado cristiano de Castilla por arquitectos musulmanes para la comunidad judía; y por supuesto, su casco antiguo, conocido como Ciudad Vieja, junto con el Monasterio de San Juan de los Reyes, el Museo de Santa Cruz y la Mezquita de Cristo de la Luz.