Di adiós al fregadero atascado: la forma más eficiente para que parezca nuevo

Cuando te encuentras con el fregadero atascado, puedes probar varios métodos trucos caseros para desatascarlo antes de recurrir a un fontanero. Son métodos muy sencillos y efectivos, y hay uno en concreto que ofrece unos resultados increíbles. Para ponerlo en práctica, solo necesitas dos ingredientes que seguro tienes en casa porque se utilizan muchísimo para tareas de limpieza: bicarbonato de sodio y vinagre blanco.

Lo que tienes que hacer para desatacar el fregadero de la cocina es lo siguiente:

1. Si hay agua estancada en el fregadero, retírala con una taza o un cubo. Recuerda que cuanto menos agua haya, mejores resultados obtendrás.
2. Vierte media taza de bicarbonato de sodio en el desagüe del fregadero.
3. A continuación, vierte media taza de vinagre blanco en el desagüe sobre el bicarbonato de sodio. Al entrar en contacto, ambos ingredientes crearán una reacción efervescente que ayudará a descomponer los residuos acumulados en la tubería.
4. Cubre el desagüe con un tapón o un trapo durante unos 10-15 minutos.
5. Una vez transcurrido el tiempo, hierve dos litros de agua. Vierte el agua caliente en el desagüe para enjuagar los residuos descompuestos por la mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre.
6. Si el fregadero sigue estando atascado, puedes repetir el proceso.

A diferencia de los productos químicos corrosivos que a menudo se utilizan para desatascar el fregadero, este truco es 100% seguro para las tuberías y el medio ambiente.

¿Cómo evitar que el fregadero se atasque?

Evitar que el fregadero se atasque es posible con una serie de hábitos. En primer lugar, es crucial que no arrojes alimentos sólidos, cáscaras de frutas, granos de café o huesos en el fregadero. Con el paso del tiempo, estos elementos pueden obstruir las tuberías.

Coloca una trampa de desagüe sobre el agujero del fregadero para evitar que los residuos grandes entren en las tuberías y límpialo con regularidad. Por supuesto, tampoco debes verter aceites de cocina o grasas calientes por el desagüe. Estos líquidos se pueden solidificar en las tuberías y causar obstrucciones.

Enjuaga el fregadero regularmente con agua caliente después de usarlo para eliminar los residuos grasos y mantener las tuberías más limpias. Además, es aconsejable que realices una limpieza mensual del fregadero y las tuberías utilizando una mezcla de bicarbonato de sodio y vinagre.

Y, por último, evita el uso de productos químicos agresivos porque pueden dañar las tuberías con el tiempo y son perjudiciales para el medio ambiente. Opta por métodos de limpieza naturales.