Comunidad Valenciana
INFRAESTRUCTURAS

Sánchez le busca un lío a Puig con la ampliación del Puerto de Valencia que rechaza Compromís

El Gobierno de España que preside el socialista Pedro Sánchez ha dado luz verde a la ampliación del Puerto de Valencia al informar favorablemente sobre esa ampliación Puertos del Estado, una entidad que depende del Ministerio de Transportes que dirige Raquel Sánchez. Pero con esa luz verde, el Gobierno de Sánchez ha buscado un problema al presidente de la Generalitat Valenciana el también socialista Ximo Puig: Compromís, socio de referencia de Puig en el Ejecutivo valenciano, está diametralmente en contra de la ampliación que sí apoyan Partido Popular y Vox, al igual que los empresarios, y que resulta imprescindible para su crecimiento y para consolidar inversiones para la Comunidad Valenciana.

De hecho, Mónica Oltra, vicepresidenta primera del Gobierno valenciano y portavoz del mismo ya ha soltado la primera andanada en relación a esta decisión: «Las decisiones que tome» al respecto del Puerto de Valencia el Gobierno valenciano «deben ir en base a la hoja del ruta del Botánico (nombre que toma el Ejecutivo autonómico y que viene del lugar donde se firmó el acuerdo de gobernabilidad). Y todas las decisiones tienen que ver con esa hoja de ruta».

La ampliación del Puerto de Valencia será posible gracias al informe favorable de Puertos del Estado, una entidad que depende del Ministerio de Transportes, que dirige Raquel Sánchez y que se ha trasladado al Consejo de Administración del puerto con el visto bueno para una la nueva terminal de contenedores y unas recomendaciones que deberá cumplir. Ahora, sólo hace falta una certificación de que no es necesario un nuevo estudio de impacto ambiental, a lo que se opone, entre otros, el alcalde de Valencia Joan Ribó, también de Compromís, que sí considera necesario ese informe.

El Puerto de Valencia y el de Barcelona se encontraban en plena carrera para consolidarse como principal referencia portuaria. Los dos necesitaban ampliarse. De hecho, el de Valencia ya desviaba embarcaciones al de Barcelona porque carecía de la suficiente capacidad para albergarlas. Ese aire se lo va a dar la ampliación. Quedar atrás en este tour de force entre los dos puertos, hubiera significado descolgarse, con la consiguiente repercusión tanto a nivel financiero y económico como de puestos de trabajo y actividad económica en su conjunto.

Pero en Valencia el proyecto ha chocado con dos enemigos. Uno, la propia izquierda valenciana. El otro, el independentismo catalán, que se ha mostrado abiertamente opuesto a la ampliación, como lo demostró en su día un diputado de la CUP, cuando accedió a la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados con una camiseta que la criticaba. También, Esquerra Republicana de Cataluña estaba en contra de la ampliación.

Tampoco Mónica Oltra ha ocultado su oposición a la ampliación de esta infraestructura. El pasado noviembre, con motivo del acto de clausura de la asamblea de Cataluña en Comú, un acto en que también participaron Yolanda Díaz y la alcaldesa de Barcelona Ada Colau, Oltra estableció un paralelismo entre la ampliación del Puerto de Valencia y el aeropuerto de El Prat, en Barcelona. Dijo entonces que en Valencia se quería enterrar hormigón «a punta de pala» y que a su juicio esa ampliación era para empresas «que trafican y especulan» con contenedores y suben artificialmente los precios. Hoy, Oltra ha dicho una críptica frase respecto a esta ampliación: «Detrás de cada decisión» del Gobierno valenciano «siempre hay un pacto técnico y político».

Joan Ribó, alcalde de Valencia, también se ha mostrado hoy opuesto a la ampliación. Y hoy, en declaraciones a Europa Press, ha sostenido que «quiero una ciudad con puerto, no un puerto con ciudad». Ribó ha insistido en la necesidad de una declaración de impacto ambiental, que lleven a cabo las autoridades correspondientes y no Puerto del Estado: «No puede ser la misma organización la que hace la obra y la que se da el permiso. No tiene sentido».

El PSOE es socio de Oltra y de Ribó. La primera es la máxima exponente de Compromís en la Generalitat Valenciana. Y el segundo tiene por socios a los socialistas en el Ayuntamiento. Está por ver cómo y en qué medida afecta la decisión a ambos pactos: el municipal y el de la Generalitat, pero lo que es evidente es que este tema ha creado un problema, y no menor, a Puig. Por contra, quien sí está decididamente con la ampliación es el Partido Popular, que a través de su síndica portavoz en las Cortes Valencianas María José Catalá ha catalogado la ampliación como «una gran noticia para la Valencia y para la Comunidad Valenciana» y ha dicho que «hay que remar juntos para que se haga cuanto antes».