Cuentos de Navidad para los niños: Historias y leyendas que les puedes contar

Los cuentos de Navidad para niños son fundamentales para crear ese ambiente mágico que reina en esta época. Muchos de nosotros, cuando recordamos nuestra Navidad de niños, recordamos los preparativos en casa con nuestros padres, el árbol de Navidad, el pesebre, las canciones navideñas , las interminables pero divertidas y cálidas cenas, la espera de Papá Noel y la atmósfera mágica típica de este período. Podéis ahora lo mismo con vuestros propios hijos, con cuentos, historias y leyendas como los que os proponemos y que les podéis contar en esta Nochebuena para hacer más amena la espera de Papá Noel.

Cuentos de Navidad para niños

Entre las imágenes que siempre se nos quedan grabadas de la Navidad,  tenemos la de los niños sentados en el sofá en pijama viendo películas y leyendo los más bonitos cuentos y leyendas de la Navidad con esa inocencia, esa curiosidad y esa serenidad en el corazón que solo los más pequeños lograr tener durante las vacaciones de Navidad.

Es como si en estos días se encendiera una bombilla en la mente, haciéndonos soñar más, y dejándonos llevar por nuestra imaginación. Y afortunadamente esto es cierto no solo para los más pequeños sino también para los mayores. Es la magia de la Navidad con sus poemas , historias, colores e imágenes. Y de las páginas de libros que nunca se desvanecerán y que seguiremos leyendo a nuestros hijos cada año, nacen historias que dan sueños, serenidad, enseñanzas y amor.

Leyendas de la navidad

Son muchas las leyendas que se cuentan en Navidad, te ofrecemos dos de las más famosas:

• La leyenda de la rosa : se dice que la pequeña Natalia no tenía dinero para comprar ningún regalo para el Niño Jesús y se tiró al suelo en la nieve llorando de tristeza. De sus lágrimas salió una maravillosa rosa que la pequeña pudo llevar de regalo al pequeño.
• La leyenda del petirrojo: se dice que en el establo también había un pajarito que se encargaba de mantener caliente al Niño Jesús durante toda la noche moviendo sus alitas sobre el fuego que se estaba apagando. Y a la mañana siguiente fue recompensado con un pecho rojo brillante.

Cómo nació el árbol de Navidad, la leyenda

Podemos explicarle también a los niños la leyenda de cómo nació el árbol de Navidad. El primer árbol de Navidad verdadero fue introducido en Alemania en 1611 por la duquesa de Brieg quien, según la leyenda, ya había hecho decorar su castillo para celebrar la Navidad, cuando notó que un rincón de una de las habitaciones El espacio estaba completamente vacío.

Por esta razón, ordenó que se trasplantara un abeto del jardín del castillo a un jarrón y se trajera a esa habitación.

Cuento sobre el árbol de Navidad

En un remoto pueblo de campo, en Nochebuena, un niño pequeño se adentró en el bosque en busca de un tronco de roble para quemar en la chimenea, como dictaba la tradición, en la noche santa. Se demoró más de lo esperado y, cuando llegó la oscuridad, no pudo encontrar el camino de regreso a casa. Además, una fuerte nevada comenzó a caer.

El niño se sintió vencido por la angustia y pensó en cómo, en los meses anteriores, había esperado esa Navidad, que tal vez no iba a poder celebrar. En el bosque, ahora sin hojas, vio un árbol aún verde y se resguardó de la nieve debajo de él: era un abeto.

Llegó un gran cansancio, el pequeño se durmió acurrucado al pie del tronco y el árbol, se movió, bajó sus ramas hasta tocar el suelo para formar una choza que protegía al niño de la nieve y el frío.

Por la mañana se despertó, escuchó a lo lejos las voces de los aldeanos que habían salido en su busca y, habiendo salido de su refugio, pudo abrazar nuevamente a sus conciudadanos con gran alegría.

Sólo entonces todos se dieron cuenta del maravilloso espectáculo que se presentaba ante sus ojos: la nieve que había caído en la noche, posándose sobre las frondosas ramas, que la planta había doblado hasta el suelo, había formado festones, adornos y cristales que, en a la luz del sol naciente, parecían luces centelleantes, de un esplendor incomparable.

En recuerdo de ese hecho, se adoptó el abeto como símbolo de la Navidad y desde entonces se adorna y se ilumina en todas las casas, casi para reproducir el espectáculo que presenciaron los habitantes de la pequeña aldea aquel lejano día.

Desde ese mismo día, los abetos de los bosques también mantienen la característica de tener las ramas colgando hacia el suelo.

Cuentos de navidad para primaria

En la escuela, los profesores podrán leer algunos cuentos navideños o sugerir a los niños algunos cuentos para leer en casa durante las vacaciones navideñas.

Aquí hay algunas ideas:

• Cuento de Navidad de Charles Dickens: Quién no recuerda la historia del viejo Scrooge que en la gélida noche de Nochebuena es visitado por el fantasma de las Navidades pasadas, presentes y futuras.
• El expreso polar de Chris Van Allsburg: Otro libro que no hay que perderse, del que se ha sacado una película maravillosa para ver con niños: un niño se sube al tren que parece esperarle sólo a él: el Polar Express, con destino al Polo Norte.
• El Grinch: Recomendamos este libro del Dr. Seuss, que se convirtió en una famosa película con Jim Carrey, para los fanáticos de las historias divertidas.

¿Cómo explicar la Navidad a los niños ?

La Navidad es ante todo una fiesta religiosa que celebra cada año el nacimiento de Jesús y su llegada al mundo. Al fin y al cabo, es una historia de gran amor y valentía, envuelta en un aura de magia y misterio, elementos que tanto gustan a los niños. ¿Cómo decirlo en palabras simples? Te lo contamos.

Érase una vez, hace muchos muchos años, el emperador ordenó que se contaran y registraran todas las familias que vivían en su imperio. Y así, José, el carpintero, y su esposa María, que estaba esperando un hijo, partieron hacia Belén junto con lo único que poseían, un burro en el que María podía sentarse cuando estaba demasiado cansada para caminar.

Una vez que llegaron a Belén, José y María no pudieron encontrar una habitación libre para pasar la noche porque no tenían dinero para pagar, por lo que decidieron buscar refugio en un establo abandonado, frío y oscuro. Allí nació el niño Jesús y María lo acostó en un pesebre con heno y la colocó junto a un buey y un burro que lo calentaban con su aliento. Un ángel rodeado de luz se manifestó a los pastores que estaban cerca y les anunció: «No tengáis miedo, estoy aquí para anunciaros una gran alegría: hoy ha nacido el que será el más grande de todos los reyes. Id y celebrad: encontraréis a un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre».

La noticia de este hecho corrió como la pólvora por todo el Imperio y más allá y también llegó a oídos de los tres hombres llamados Magos, Gaspar, Melchor y Baltasar, quienes decidieron llevar regalos -oro, incienso y mirra- a este niño tan especial. Para encontrar su camino, siguieron un cometa. Llegaron a Belén unos días después y su llegada coincide con la Epifanía, el último día de las fiestas navideñas.