Liam, el bebé que ha sobrevivido al trasplante de ocho órganos

En muchas ocasiones, los niños se convierten en un referente para todos y nos dan una notable lección de lucha y positividad ante las adversidades de la vida. Ejemplos son así tanto Audrey, la niña que sufre Anemia de Diamond-Blackfan y que eso no impide que haga todo lo que le apasiona, como el pequeño que ahora queremos que conozcas y que es un auténtico luchador. Nos estamos refiriendo a Liam, un bebé que ha sobrevivido al trasplante de ocho órganos.
El protagonista
Liam Cerda es el nombre completo de la figura que hoy copa las portadas de los medios de comunicación a nivel mundial. Es un pequeño de un año, oriundo de Texas, que ha logrado mostrar a todos su fortaleza y su valentía ante la vida. Una vida que le ha llevado a nacer con una grave patología que, a su vez, le ha obligado a tener que pasar por quirófano y someterse a una operación a vida o muerte.
Su enfermedad
En concreto, la enfermedad rara que sufre el bebé no es otra que lo que se conoce como Síndrome de Berdon. Es de tipo congénito y fundamentalmente se manifiesta a través de lo que es una distensión abdominal masiva provocada por distintas situaciones tales como un microcolon, un hipoperistaltismo o una vejiga urinaria excesivamente dilatada, por ejemplo.
Muy pocos casos en el mundo se han dado hasta ahora de dicha patología, que cuenta con estas otras señas de identidad:
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Es más frecuente en mujeres.
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Lo habitual es que los pacientes no lleguen al año de vida debido a que padecen además insuficiencia renal, complicaciones notables en materia de nutrición…
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Actualmente se desconoce la causa concreta que la origina.
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Fue descubierta por primera vez en la segunda mitad del siglo XX, concretamente en 1976, por el doctor que le da su nombre, Berdon.
El trasplante
Desde que vino al mundo, el pequeño Liam ha tenido que recibir su alimentación a través de un sistema intravenoso porque, como suele ser habitual en pacientes con su misma enfermedad rara, tenía serias dificultades al respecto. Pero no sólo eso, la gravedad de su situación hizo que los doctores que estaban al frente de su caso se vieran en la necesidad de estudiarlo a fondo y de tener que plantear una solución al respecto, ya que eran perfectamente conscientes de la escasa esperanza de vida de las personas con el mencionado Síndrome de Berdon.
El trabajo y tesón de sus médicos, unido a la constante lucha de sus papás por darle un presente y un futuro, fueron los que finalmente llevaron a que se llegara a una decisión: era necesario operarle de urgencia y proceder a trasplantarle en la misma intervención un total de ocho órganos (estómago, intestino grueso, intestino delgado, vejiga, hígado, dos riñones y páncreas).
A pesar de la complejidad y larga duración de la operación todo salió perfecto y ahora, semanas después de pasar por el quirófano, el bebé de un año se está recuperando perfectamente. Tanto es así que ya, por ejemplo, come como cualquier otro niño de su edad.
La feliz mamá (Julissa) ha sido la que no ha dudado en dar a conocer la evolución del menor, del que ha contado que está deseando poder levantarse de la cama para jugar, que se halla mucho menos irritable y que incluso ahora puede descansar y dormir como es apropiado para su edad.
Recuperación con el cariño familiar
El multitrasplante al que ha sido sometido es, sin lugar a dudas, lo que ha dado calidad de vida y esperanza a Liam, que ahora se está recuperando a pasos agigantados gracias a los cuidados y el cariño que le dan sus papás, pero también su hermana (Delilah), que tiene 6 años y que también sufre la citada enfermedad de Berdon.
Al igual que el pequeño, también ha pasado por el quirófano para recibir un total de siete órganos y ya ha evolucionado notablemente en su recuperación. Tanto es así que incluso se encarga de ayudar al benjamín de la casa. En concreto, la mamá reconoce, a través de diversos medios como “Tu otro diario”, que es realmente admirable “cómo se hace cargo de su hermano, con muchísimo cuidado, le lava las manos y le pone la máscara”.
Además de felices por cómo han transcurrido los hechos, sobre todo, orgullosa de sus dos vástagos es como se encuentra el matrimonio que reconoce que no es nada fácil tener que cuidar a la vez a dos hijos que han sido intervenidos quirúrgicamente a vida o muerte y que sufren la ya mencionada enfermedad rara. No obstante, también expone que, a pesar de todas las dificultades, se miran en los pequeños para tomar fuerzas de donde ya nos las tienen, pues esos les demuestran día a día su fortaleza, su lucha constante por salir adelante y, sobre todo, sus ganas de vivir.