Teresa Rodríguez se niega a retirar sus banderas del pueblo gitano, LGTBI y Trans del Parlamento andaluz
La líder de Anticapitalistas, Teresa Rodríguez, ha manifestado este miércoles su negativa a retirar las banderas que simbolizan el colectivo LGTBI, el movimiento Trans y el pueblo gitano y que adornan el espacio cedido por el Parlamento de Andalucía para los diputados no adscritos.
«No vamos a quitar ninguna bandera y si nos quitan alguna, volveremos a ponerla», ha señalado Rodríguez en rueda de prensa en la Cámara andaluza, después de que la Mesa del Parlamento de Andalucía informara a los diputados no adscritos que este miércoles debían de proceder «a reponer el mobiliario y los elementos existentes en los espacios comunes al estado en el que inicialmente se encontraban».
En sus redes sociales, Teresa Rodríguez ha denunciado que «la Presidencia del Parlamento o la Mesa, no lo sabemos aún, nos han puesto una trabajadora de seguridad en la puerta del despacho que compartimos los 11 diputados de Adelante Andalucía para controlar quién entra y quién sale. No entiendo nada». «Al parecer», prosigue, «se le pide a la seguridad que evite que entre en nuestras dependencias nadie que no sea un diputado no adscrito», lo que considera un límite a «nuestra capacidad de representación».
La Presidencia del Parlamento o la Mesa, no lo sabemos aún, nos han puesto una trabajadora de seguridad en la puerta del despacho que compartimos l@s 11 diputad@s de Adelante Andalucía para controlar quién entra y quién sale. No entiendo nada.
— Teresa Rodríguez ۞ (@TeresaRodr_) February 24, 2021
Dicho espacio cedido en el Parlamento andaluz lo comparten con la también parlamentaria no adscrita Luz Belinda Rodríguez (ex de Vox), que tiene una bandera de Falange.
Rodríguez ha indicado que no van a aceptar de ninguna manera que mediante una comunicación de la Mesa del Parlamento se «equiparen» banderas que representan derechos, como la bandera LGTBI, de lucha del movimiento la Trans y la simbología del pueblo gitano», además de la bandera de Andalucía, con la bandera de Falange, que está sancionada por la Ley de Memoria Democrática aprobada por el Parlamento.
«Es algo absolutamente intolerable y no vamos a quitar ninguna bandera y si nos quitan alguna bandera, volveremos a ponerla, no porque nos importen tanto, sino porque de ninguna manera vamos a permitir que se produzca esa equiparación entre la defensa de libertades y derechos con la representación del crimen y del genocidio en Andalucía».
También ha denunciado el hecho de que el Gobierno andaluz «autopremie» al Parlamento con la Medalla Clavero Arévalo por el 28 cuando tiene colgada en sus muros una bandera de «quienes asesinaron a Blas Infante».
En el comunicado emitido por la Mesa del Parlamento de Andalucía, se indica que en caso de no atender a este requerimiento oficial, «por los servicios de la Cámara se realizarán las actuaciones pertinentes para la adecuada ordenación de los considerados espacios y del mobiliario y elementos en ellos existentes y, en su caso, para su retirada conforme a lo que se expresa en el presente escrito».
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