Andalucía
Sierra de Baza

Misterio en Granada: aparecen más de 100 ciervos muertos sin signos de violencia ni enfermedades

La Junta de Andalucía investiga la muerte en cadena de ciervos en el Parque Natural de la Sierra de Baza (Granada), cuyos cadáveres han sido localizados sin signos visibles de violencia ni enfermedades infecciosas. El Gobierno andaluz cifra los animales fallecidos en «algunas decenas» y las asociaciones calculan ente 100 y 200 pérdidas en el último mes y medio.

La Junta ha explicado que se han tomado muestras de algunos de estos cadáveres y se han remitido al Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de Andalucía, que está operativo en Málaga, para conocer las causas de esta elevada mortandad. Se prevé que el informe del laboratorio que pueda arrojar luz sobre este asunto esté finalizado la semana que viene, según han detallado fuentes del Gobierno autonómico a Europa Press.

Los animales hallados muertos no presentan signos visibles de violencia y las primeras hipótesis apuntan a que tampoco se trataría de una enfermedad infecciosa. Hasta el momento esta problemática, adelantada este martes por el diario Ideal, ha sido exclusiva de los ciervos sin que se haya manifestado en otra fauna, como cabras u ovejas.

A la espera del informe de laboratorio que revele las causas exactas, los expertos trabajan con la posibilidad de que esta elevada mortandad esté vinculada con las condiciones climatológicas, dado que a la «pertinaz» sequía del pasado invierno le ha seguido un intenso periodo de lluvias y frío que llegó a motivar la presencia de nieve en la Sierra de Baza.

La Asociación Proyecto Sierra de Baza señala en su página web que «a falta de información más concluyente se han descartados varias patologías como es la sarna, brucelosis o lengua azul. También se ha descartado el llamado gusano de la nariz».

Según este colectivo, la mayor concentración de ejemplares muertos se da en la zona norte y centro, que es precisamente donde más ha llovido, y «a falta de datos más exactos y de una forma totalmente estimativa» considera que «pueden haber muerto un mínimo de 100 a 200 ciervos en este episodio primaveral».