Andalucía

El ex marido de Juana Rivas se querella contra Irene Montero y Errejón por «injurias y calumnias»

El ex marido de Juana Rivas, Francesco Arcuri, se ha hartado de que desde el Gobierno de España se le trate como un maltratador así como que se justifiquen los delitos probados de su ex mujer. De este modo, sus abogados en España han solicitado actos de conciliación tanto con Irene Montero, ministra de Igualdad, como con Íñigo Errejón, líder de Más País. El motivo: las constantes manifestaciones públicas en favor de su ex mujer, en las que obvian por completo las condenas que recaen sobre Rivas por secuestrar a sus hijos.

Estos actos de conciliación suponen el paso previo para presentar querellas por «injurias y calumnias». En estos escritos, se destaca cómo tanto la ministra de Igualdad como el diputado se han pasado por ‘el arco del triunfo’ las sentencias judiciales por las que Rivas se encuentra cumpliendo condena. De hecho, recuerda la defensa de Arcuri, la Justicia italiana ha otorgado la custodia completa al padre.

Así, Arcuri exige que tanto Montero como Errejón se retracten públicamente de sus palabras, así como que la ministra de Igualdad abone a Arcuri, en concepto de daños y perjuicios a su imagen, 80.000 euros, mientras que el monto que habría de desembolsar Errejón ascendería a 60.000 euros. Arcuri destinaría, , según El Mundo, este dinero a asociaciones infantiles.

Declaraciones Montero

La ministra de Igualdad, Irene Montero, afirmaba hace solo unas semanas que si Juana Rivas, condenada a dos años y seis meses de prisión por la sustracción de sus dos hijos menores, entra en prisión definitivamente, va a ser «un escándalo para el movimiento feminista» y «una muy mala noticia para la democracia».

«Creo que si Juana Rivas ingresa en prisión definitivamente no solamente va ser un escándalo para las mujeres, para el movimiento feminista sino una muy mala noticia para la democracia porque estaremos mandando un mensaje a muchas mujeres de que proteger a sus hijos y a sí mismas puede salirles muy caro», detallaba Moreno en declaraciones a los medios antes de participar en uno de los cursos de Verano de la Complutense, en El Escorial, sobre ‘Valores democráticos, igualdad y universidad’.

Así se pronunciaba la ministra después de que se supiera que Rivas tendría que ingresar de nuevo en el Centro de Inserción Social (CIS) Matilde Cantos de Granada, después de que el Juzgado estimara parcialmente el recurso de la Fiscalía contra la concesión del tercer grado que desde el pasado 15 de junio le ha permitido cumplir condena en su domicilio con control telemático.

Para la ministra, es importante que todas las instituciones hagan una «reflexión» sobre la importancia de demostrar que actúan «para proteger los derechos de todas las mujeres».

Por parte de su ministerio, Montero quiso trasladar a todas las mujeres de España que «no están solas» y, especialmente, se dirigía a Juana Rivas y a Irune Costumero, madre de una niña a la que la Diputación vizcaína retiró la custodia al considerar que «la manipulaba contra el padre». Costumero alegó que se le había aplicado el ‘síndrome de alteración parental’ (SAP), que ahora está prohibido por Ley.

«Que sepa Juana, que sepa Irune Costumero que no están solas, que vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano para garantizar que las leyes y las políticas públicas aseguran que los derechos de las mujeres no son vulnerados», ha subrayado.