Crisis migratoria en Ceuta: se dispara un 312% la entrada de inmigrantes ilegales a la ciudad
La Guardia Civil "preocupada" por la cantidad de menores marroquíes que llegan a nado a Ceuta
La Guardia Civil de Ceuta está «profundamente» preocupada por la cantidad de menores marroquíes que intentan llegar a nado hasta Ceuta los días que el clima no acompaña, ya que es cuando, a priori, hay menos vigilancia por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE). Fuentes de la Benemérita aseguran a OKDIARIO Andalucía que cada vez es más frecuente ver a menores de edad intentar llegar a nado a la ciudad autónoma cuando las condiciones meteorológicas son adversas, con el fuerte riesgo que ello conlleva. En este sentido, cabe destacar que entre el 1 de enero y el 15 de marzo han llegado a Ceuta 743 inmigrantes irregulares, un 312,8% más que durante el mismo periodo de 2023 (180), según el último balance publicado por el Ministerio del Interior.
Sin ir más lejos, efectivos del Servicio Marítimo y de los Grupos Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil de Ceuta rescataron durante la tarde de este jueves a media docena de jóvenes de nacionalidad marroquí, aparentemente menores de edad, cuando intentaban acceder a territorio español a nado pese a las adversas condiciones meteorológicas.
El temporal de Levante que azota el área del Estrecho con rachas de viento por encima de 40 kilómetros por hora y olas de hasta cuatro metros en el litoral de la ciudad autónoma ha hecho que las Fuerzas de Seguridad marroquíes hayan retirado de nuevo sus embarcaciones del agua, aunque los agentes del país vecino sí han intentado evitar en las playas más cercanas al espigón fronterizo del Tarajal la salida de inmigrantes irregulares.
Fuentes de la Guardia Civil de Ceuta han explicado que sus agentes han permanecido en las inmediaciones del extremo sur del vallado que separa la localidad española de Marruecos mientras las condiciones en el agua lo han permitido, auxiliando a varios jóvenes cuya vida corría peligro.
Los intentos de entrada, que en los temporales anteriores se habían concentrado alrededor del espigón fronterizo norte, el de la barriada de Benzú, que da a aguas del Estrecho de Gibraltar, se han concentrado esta vez en el del Tarajal y se han diluido con la caída de la noche y la llegada de la hora de ruptura del ayuno del mes sagrado musulmán de Ramadán que comenzó el pasado martes.
La presión migratoria infanto-juvenil ha obligado al Gobierno local que preside Juan Vivas (PP) a declarar una emergencia para activar la derivación de menores extranjeros no acompañados a la península, ya que el número de acogidos por el Servicio de Protección actualmente, por encima de 250, casi dobla el máximo establecido incluso para situaciones de crisis (132).