Cientos de inmigrantes llegan a Ceuta de madrugada: hay varios fallecidos y decenas sin interceptar

La Guardia Civil ha tenido una de las noches más duras del año por la inmigración ilegal. Decenas de personas han aprovechado la niebla para intentar alcanzar Ceuta bordeando el espigón del Tarajal, lográndolo gran parte de ellos. Fuentes de la Benemérita advierten a OKDIARIO Andalucía de la dificultad que existe para dar una cifra, pues hay personas fallecidas, otras interceptadas y muchos que han llegado a la ciudad autónoma sin que los agentes les hayan podido atrapar.

La Guardia Civil, así las cosas, ha tenido mucho trabajo en una madrugada en el que el goteo de inmigrantes ha sido constante. En torno a las cinco de la mañana ya se habían interceptado cerca de 50 inmigrantes ilegales, algunos de ellos menores de edad. Sin embargo, se seguían escuchando gritos en el mar, tal y como relata la prensa local.

Los inmigrantes prefieren mantenerse en el agua y arriesgar aún más sus vidas antes que ser interceptados por los agentes de la Guardia Civil, lo que provoca que muchos de ellos mueran de hipotermia en el mar sin ser localizados. De hecho, según cuenta El Faro de Ceuta, muchos de los fallecidos cuyos cuerpos han sido recuperados en aguas de la ciudad autónoma no lo han sido por ahogamiento, sino por la hipotermia previa debido a las bajas temperaturas sufridas.

En el mar, los agentes divisaban cientos de flotadores abandonados por los inmigrantes ilegales que alcanzaban la costa y escapaban. Para los guardias civiles que intentan salvar sus vidas resulta muy duro intentar localizar a quienes gritan desde el mar desesperados, ya que directamente no dan abasto, tal y como reconocen fuentes próximas a los propios agentes.

Cabe destacar, en este sentido, que este jueves ya fueron cerca de un centenar los inmigrantes ilegales que llegaron a cruzar la frontera con éxito. Según relata la prensa local, lo primero que hacen estas personas una vez llegan a Ceuta es rezar.

Durante toda la noche los agentes no han cesado de recoger inmigrantes. Todos eran trasladados a la frontera. Allí se personaba una unidad de Cruz Roja para darles mantas. Los adultos intentarán ser entregados a Marruecos si el vecino país los acepta, los niños acudirán a los centros de menores operativos en la ciudad, tal y como expone El Faro de Ceuta.