El Ayuntamiento de Cádiz defiende el boicot del público a la chirigota negacionista: «Libertad absoluta»
La concejal de Fiestas y Carnaval se abre a debatir cambios y realizar una preselección de las actuaciones
El Ayuntamiento de Cádiz ha defendido la respuesta del público del Teatro Falla contra una chirigota con mensajes negacionistas sobre las vacunas, la pandemia o el cambio climático, y ha abierto la posibilidad de plantear cambios en el Concurso Oficial de Agrupaciones del Carnaval tras la bronca monumental registrada este domingo, en la que el público respondió con gritos, abucheos y cánticos para acallar la actuación de Abre los ojos.
La concejal de Fiestas y Carnaval, Beatriz Gandullo, se ha mostrado a favor de que a partir de este año se estudie establecer algún tipo de preselección o filtro del certamen de coplas, que hasta ahora siempre ha dejado actuar a cualquier agrupación sin revisar su repertorio ni analizar su calidad de forma previa. «El estreno de una agrupación es inédito para todos, también para el Ayuntamiento, y el gobierno municipal no valora la calidad de los grupos», ha remarcado la edil a preguntas de los periodistas.
«Si es un debate tener que abrir una preselección, lo llevaremos al consejo y lo debatiremos. Estamos dispuestos a escuchar, valorar y, por supuesto, seguir mejorando. Siempre hemos considerado que el concurso está vivo, pero no cambiaremos nada que el carnaval no quiera cambiar», ha señalado la edil.
Gandullo también ha defendido al público que abucheó la chirigota: «Igual que existe la libertad de expresión para venir a traer un repertorio, existe la libertad de expresión del público en respuesta a lo que ve. Y lo que vimos anoche es lo que el público quiso expresar. Libertad absoluta». La edil se ha negado a valorar la chirigota negacionista, subrayando que es algo que no hace con ninguna otra a lo largo del concurso.
Además, ha recordado que la bajada de telón, como pedía el público asistente, «ya no se contempla en las bases». El actual reglamento no contempla impedir una actuación salvo por problemas de seguridad o fuerza mayor.
La concejal ha detallado que el jurado tiene 48 horas para analizar las imágenes y decidir si descalifica o no a la chirigota, cuyo repertorio no pudo escucharse ni en la radio ni en la televisión ni en el teatro.
También se analizarán las imágenes que se proyectaron en una pantalla por si alguna es susceptible de haber vulnerado algún derecho fundamental, cuestión de la que se encargarían, en caso afirmativo, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado.
Polémica actuación
La polémica nace a raíz de la actuación de la chirigota Abre los ojos. Fue presentada por el humorista vasco Óscar Terol, que ha trabajado en series como Allí abajo, de Antena 3, o el programa Vaya semanita, de ETB. «A muchos de los que estamos aquí nos han censurado, por eso hemos venido al Carnaval de Cádiz. El día que aquí haya censura, apaga y vámonos. Pedimos vuestro asilo analítico», dijo el actor en el discurso de presentación de la agrupación.
La chirigota lanzó mensajes como «la pandemia fue una farsa» o «nos irradian con antenas». De fondo, una pantalla mostraba diferentes recortes de prensa y mensajes contra la «comida adulterada», la «fumigación» con chemtrails o la «reducción» planificada de la población.
El repertorio apenas pudo escucharse ante el estruendo del coliseo gaditano, que primero mostró su rechazo con abucheos, silbidos y gritos de «¡fuera del Falla!», y luego pidió al jurado que bajara el telón. La platea también cantó coplas históricas del Carnaval de Cádiz para torpedear la actuación.
Uno de los guitarristas se fue antes de finalizar la actuación y otra integrante, la más joven, acabó llorando. «Queríamos dar un mensaje muy importante, pero la gente sigue aborregada», manifestó una de las componentes de Abre los Ojos en declaraciones a Onda Cádiz nada más bajarse el telón. También tildó al público de «vulgar» y «adoctrinado».
Tras la actuación, la directora de la chirigota, Katy Balber, reconoció que el grupo no estaba a la altura vocal e interpretativa del concurso, si bien acusó de «boicot» a la organización y al público, y apuntó a los medios de comunicación como responsables de «un ataque a la libertad de expresión».