Un español de 58 años con antecedentes y una mujer detenidos por el asesinato de Tirso de Molina
Un hombre de 58 años ha sido detenido por el asesinato de Concha, la mujer de 61 años acuchillada ayer en la tienda donde trabajaba en la madrileña plaza de Tirso de Molina. Junto a él ha sido arrestada también una mujer relacionada con los hechos. La Policía Nacional ha logrado esclarecer este crimen en menos de 24 horas, ya que ambos han sido detenidos a las cuatro de la tarde en la calle Atocha. El hombre detenido es de nacionalidad española y tiene 58 años, incluso había sido detenido ya por los agentes de la comisaría de Centro en alguna ocasión. La mujer tiene 55 años. Ambos tienen antecedentes por robo con violencia y no presentan problemas psiquiátricos ni dependencia de drogas.
El detenido, que huyó con la camisa llena de sangre de su víctima, es un habitual de la zona, por donde merodeaba con asiduidad, pero no es toxicómano. La víctima, Concha, de 61 años era la esposa del dueño del local y murió este lunes al mediodía apuñalada en el interior de una tienda de ropa ubicada en el número 4 de la Plaza de Tirso de Molina, en el distrito Centro de Madrid. Se trata de la encargada de la tienda, casada y con dos hijos, y la hipótesis principal de la Policía fue que se trataba de un atraco frustrado al que la mujer se resistió. La detenida este martes se quedó esperando fuera de la tienda mientras el hombre apuñalaba a la encargada.
Ocurrió pasadas las 13:20 de este lunes, cuando se acercaba la hora del cierre. Conchi, se encontraba en su comercio de ropa de trabajo y masculina, Vistebien, cuando un hombre abandonaba a la carrera la zona en compañía de otra mujer. Minutos después varias personas alertaban a la Policía. Conchi tenía varias heridas de arma blanca.
A la llegada de los sanitarios de Samur-Protección Civil la víctima se encontraba en parada cardiorrespiratoria y presentaba varias heridas por arma blanca, al menos una de ellas en el abdomen. Los facultativos practicaron durante una media hora labores de reanimación cardiopulmonar sin éxito, por lo que finalmente certificaban su fallecimiento. Hasta el lugar del crimen se trasladó el marido de la fallecida y otros familiares, todos visiblemente afectados. La mujer era la esposa del dueño del negocio, una tienda familiar cuya fundación se remonta a la década de los años cuarenta.
Conchi se resistió al atracador hasta morir a causa de varios cortes y puñaladas. El asesino sorprendió a la mujer de 61 años en el mostrador de la tienda donde trabaja y se llevó una cantidad de dinero indeterminada tras matarla. Un testigo vio huir al ladrón a la carrera, vestido con una camisa de cuadros, rumbo hacia la zona de Atocha.
Conchi, a punto de ser abuela, estaba a punto de echar el cierre cuando irrumpió en el comercio de Tirso de Molina el asesino. Fue cuestión de minutos, una joven que pasaba por allí vio a la víctima ensangrentada junto a la puerta del comercio y llamó al 112, un camarero de la zona alertó a una patrulla de Policía que inmediatamente acudió al lugar sin poder salvar la vida de la víctima.
Hay que destacar que el Grupo V de Homicidios de Madrid logra así resolver de manera eficaz un homicidio en menos de 24 horas. Queda por localizar el arma empleada en el apuñalamiento después de que los agentes inspeccionaran las papeleras y contenedores de la zona sin lograr dar con el cuchillo. Dentro de unas horas, tras tomarles declaración, ambos pasarán a disposición judicial.