El lado más desconocido de Carlos Latre: su hija Candela y la crisis con su mujer

Carlos Latre es uno de los famosos que posee un lado de lo más desconocido, su vida personal de la mano de una hija Candela y de una crisis con su mujer. ‘Crónicas Marcianas’ dio a conocer en el panorama nacional a un humorista capaz de imitar a una gran variedad de personajes, Carlos Latre. Detrás de la eterna sonrisa y de su capacidad para crear nuevos caminos, después del famoso programa tuvo que reinventarse, pasó un duro bache financiero, arruinado, sacó pecho y volvió con más fuerza que nunca.

La crisis con su mujer y su hija Candela, este es el lado más desconocido de Carlos Latre

A sus 43 años este comunicador ha pasado por muchos episodios en su vida, era un jovencito de poco más de 20 años cuando se dio a conocer en la televisión nacional. Un éxito que no supo asimilar del todo y que, pese a todo, terminaría dejándole en una posición complicada. Arruinado, según él mismo afirma, bajo a los infiernos para volver a subir.

Lo vemos en ‘Tu cara me suena’ siendo jurado de un concurso del que sabe mucho, meterse en el papel de un personaje o imitar. Pero más allá de ese nuevo Carlos Latre, un hombre que ha perdido 40 kilos y ha regresado a la pequeña pantalla con mucha fuerza, hay un ser humano de carne y huesos. Todos pasamos por etapas o fases en la vida, Carlos Latre no se escapa de esta humanidad, detrás de las cámaras y lejos de un plató de televisión se ha enfrentado a varios problemas.

Por suerte, cuenta con la fortaleza que la aporta su hija Candela, la joven de 14 años es el gran motor de su vida. La madre de la niña es Yolanda Marcos, su exjefa, una periodista con una carrera impresionante. Por aquel entonces, Marcos era la jefa de Informativos Radio España. Vivieron una relación casi en secreto, Yolanda tenía pareja e incluso llegó a comprometerse con su anterior novio.

Latre la conquistó y en 2004 se casaron, en 2007 nació Candela formando una feliz familia. En 2015 llegó la separación por problemas personales y laborales. Vivían él en Madrid y ella en Barcelona por motivos de trabajo, con lo cual, la relación se enfrío. Tardaron 2 años a darse cuenta de que uno no podía vivir sin el otro y en 2017, hasta la actualidad, vuelven a estar juntos.