Evita riesgos: el truco de la mochila de la DGT para evitar el peligro al dejar los niños en la escuela

La DGT ha explicado el famoso truco de la mochila para evitar el peligro al dejar los niños en la escuela en esta vuelta al cole. Después de más de 2 meses sin pisar el colegio, las aulas se reabren y volvemos a una rutina que conlleva sus riesgos. Dejar a los niños en el colegio vuelve a ser algo peligroso, especialmente en ese afán de dejarlos en la misma puerta para que no tengan que caminar. Madres y Padres, la DGT tiene muy claro qué hacer para evitar el peligro.

Este es el truco de la mochila de la DGT que mantendrá los niños fuera de peligro

Llegar a la escuela puntual es algo que todos queremos. Espera ar los niños que acaban con sus rutinas y empiezan desde cero en un nuevo año. Dejarlos en la entrada con el coche no siempre es fácil, pero es necesario. Podemos evitar un efecto que los pone el riesgo ante muchos más coches que han estado esperando su turno.

Mucho lío y una velocidad demasiado rápida puede acabar con el desastre. Para evitarlo, nada mejor que buscar ayuda en los trucos de la DGT que ha querido hacer en esta vuelta al cole un manual para no dejarse nada de nada. Volvemos a empezar desde cero y lo hacemos de la mejor manera posible.

La DGT quiere que las mochilas se queden en el maletero, de esta manera evitaremos que salgan los niños a toda velocidad y puedan ponerse en riesgo ante los coches que también hacen lo mismo. Es mejor tardar un poco más que hacerlo rápido y perder de vista a los niños ante el riesgo que esto conlleva.

Este truco de la mochila nos hace ganar tiempo para ver un poco más allá. Pondrá un poco en jaque a aquellos otros padres que hacen lo mismo. Tomarse las cosas con calma es algo que no podemos dejar escapar. Ya vamos suficientemente estresados, como para ponernos más nerviosos a la hora de llegar al cole.

Será más fácil de lo que parece ir con un poco de calma para que de esta manera evitaremos las prisas y los accidentes. Cualquier despiste es importante y más en un colegio en el que empezamos a sufrir los efectos de llegar antes que nadie.