OkSalud
psicología

Día Mundial de la Alegría, ¿Por qué se celebra 1 de agosto?

Coincidiendo con el 1 de agosto, día en el que muchas personas empiezan sus vacaciones, se celebra el Día Internacional de la Alegría. Se instauró desde 2010 por iniciativa del colombiano Alfonso Becerra.

¿Su objetivo? En una buena parte era reflexionar sobre la importancia de tener presente este sentimiento cada día de nuestras vidas. Pues encontró que habían días para diversas cosas, pero no para un sentimiento tan humano y universal.

Alfonso Becerra presentó esta iniciativa en el marco del Primer Congreso de Gestión Cultural Chileno. La misión de este día es llevar el mensaje y los beneficios de reconocer la alegría en nuestra vida y nuestro entorno.

Esta festividad se celebra en al menos 14 países del mundo, pero la verdad es que cada año se extiende y son más los países que también quieren compartir este día mágico con los demás.

El sentimiento de alegría

La alegría, que procede del latín alicer o alecris, es uno de los sentimientos gratos y vivos que suele manifestarse con signos exteriores, palabras, gestos o actos con que se expresa el júbilo. Es una fantástica emoción que debe experimentar el ser humano en la vida.

A diferencias de la felicidad, hemos de remarcar que se trata de una sensación y sentimiento que dura poco, es corto y espontáneo en el tiempo. Aquellas personas alegres son sonrientes y risueñas, y saben afrontar la vida desde el positivismo para seguir adelante.

La Sociedad Española de Neurología (SEN) afirma que reírse a menudo puede suponer hasta cuatro años y medio más de vida.

Beneficios de la alegría

Son muchos los beneficios de esta emoción. Por un lado, libera tensiones porque es el mejor desestresante, ante ello, debemos sonreír y reírnos mucho más. Nos da más energía cuando nos levantamos cada mañana para afrontar temas personales y laborales. Esto provoca un incremento de la productividad.

Entonces obtenemos bienestar, pues gracias a la liberación de dopamina, que es el neurotransmisor ligado a la agilidad mental, junto a la disminución de la producción de cortisol, se libera el estrés.

La alegría también es una poderosa arma para el positivismo, fomentar las relaciones interpersonales, eliminan bloqueos emocionales y mucho más. Se vive mejor con alegría.