salud digestiva

Alerta sanitaria: aumenta el número de diagnósticos por intolerancia a la lactosa

En la actualidad, entre un 20% y un 40% de la población española tiene intolerancia a la lactosa

Intolerancia a la lactosa
Un niño rechaza un vaso de leche.
Diego Buenosvinos
  • Diego Buenosvinos
  • Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

El diagnóstico de intolerancia a la lactosa ha aumentado en España en los últimos años gracias a una mayor accesibilidad de las pruebas, más rápidas y económicas, además de por una mayor concienciación sobre las intolerancias alimentarias. Así lo afirma la Dra. Gabriela Pocoví, doctora en Medicina y Salud pública y dietista-nutricionista, quien ha participado en la ponencia Nutira: vivir sin limitaciones la intolerancia a la lactosa, en el marco de INFARMA, el encuentro europeo de farmacia.

«El aumento en el diagnóstico de la intolerancia a la lactosa refleja una mayor conciencia sobre la salud digestiva y un mejor acceso a pruebas, lo que nos permite adaptar mejor la dieta a las necesidades de cada persona, mejorar su calidad de vida y evitar molestias innecesarias», apunta la Dra. Gabriela Pocoví.

En la actualidad, entre un 20% y un 40% de la población española es intolerante a la lactosa, entendida como un conjunto de síntomas derivados de la incapacidad de digerir la lactosa en el intestino delgado, y que puede generar dolor, hinchazón abdominal, náuseas, meteorismos, flatulencias, espasmos o diarrea.

Los síntomas aparecen entre 15-30 minutos después de la toma de la lactosa hasta las 2 horas, y desaparecen 3-6 horas después. En este contexto, el farmacéutico comunitario, primer eslabón del sistema sanitario, es un actor clave en el acompañamiento y recomendación de las personas con intolerancia a la lactosa.

Gestionar los síntomas

«Dado el impacto que la intolerancia a la lactosa tiene en una parte significativa de la población, el apoyo adecuado puede marcar la diferencia en la calidad de vida de quienes la padecen, por lo que la orientación personalizada del farmacéutico comunitario resulta fundamental para gestionar eficazmente los síntomas y mejorar el bienestar diario de los afectados», señala la Dra. Isabel Alarcón Herranz, head of Medical Affairs en Laboratorios Salvat, quien también ha participado en la ponencia.

Además, solo el 8,7% de las personas con intolerancia a la lactosa considera que existe suficiente concienciación de la sociedad sobre esta condición, según el Estudio sobre percepción y hábitos de personas con intolerancia a la lactosa impulsado por laboratorios Salvat en colaboración con la Asociación de intolerantes a la lactosa España (ADILAC). Ante esta realidad, las formaciones a farmacéuticos son clave para sensibilizar sobre esta condición y conocer sus posibles alternativas y soluciones.

Población con intolerancia a la lactosa

En cifras y según el estudio, más del 80% de la población con intolerancia a la lactosa ve afectada su calidad de vida por esta condición. En este sentido, el 90% de las personas con intolerancia a la lactosa han dejado de pedir postre en restaurantes como consecuencia de su condición, el 68% no toma café con leche por la mañana, el 70% se lo piensan dos veces antes de pedir comida a domicilio, y el 60% ha visto reducidas sus salidas a comer o cenar fuera.

Según la Dra. Gabriela Pocoví, «la intolerancia a la lactosa no solo impacta en la salud digestiva, sino que también limita las actividades cotidianas, lo que afecta directamente la calidad de vida. Sin embargo, con una dieta saludable, trabajar en pro de recuperar la salud intestinal del paciente y la búsqueda de soluciones adecuadas, como productos fermentados, lácteos de oveja y cabra, o el apoyo la enzima lactasa, es posible disfrutar de las comidas y mantener una vida social activa sin renunciar al bienestar».

Lo último en OkSalud

Últimas noticias