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12 de noviembre: Día Mundial contra la Neumonía

Este 12 de noviembre se celebra el Día Mundial contra la Neumonía. Una enfermedad que puede tener sus serias consecuencias si no se trata de inmediato.

Según indica Unicef, se trata de la enfermedad infecciosa que más muertes provoca en la infancia. A veces, sus síntomas se escondían entre otras alteraciones menos graves como los resfriados.

Desde Unicef establecen que si se actúa pronto y estamos seguros de que nos enfrentamos a una neumonía, podemos salvar muchas vidas, pues un tratamiento correcto reduce en un 42% la mortalidad infantil.

Las cifras en España

Según datos del Instituto Nacional de Estadística, la neumonía provoca unas 10.000 muertes cada año. Además, el incremento en la esperanza de vida y la mayor supervivencia de pacientes con enfermedades crónicas y/o con inmunodeficiencias hace prever que las cifras continúen en aumento.

La Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, Separ, da a conocer que es importante prevenir y la mejor forma es la vacunación frente a gripe y frente al neumococo que puede administrarse a cualquier edad a partir de las 6 semanas de vida.

También se puede prevenir con hechos cotidianos, como lavarse las manos de forma frecuente, cubrirse la boca y la nariz al estornudar o toser y no fumar.

Cómo se contagia. Los virus presentes en la nariz o la garganta del enfermo infectan al inhalarlos o respirarlos.

La neumonía es la primera causa de muerte por infección, superando así los fallecimientos por accidente de tráfico.

¿A quiénes afecta especialmente? En el Día Mundial contra la Neumonía, destacamos que aunque puede afectar a toda la población, quienes tienen más riesgo son los niños menores de cinco años y también las personas mayores de 65 años.

Esta enfermedad supone casi unas 100.000 hospitalizaciones al año que supone un coste de 479 millones de euros para el sistema sanitario.

Qué síntomas existen

Son diversos, pero están relacionados con la tos, dolor en el pecho, cansancio general, fiebre, transpiración y escalofríos con temblor, náuseas, vómitos o diarrea y también la dificultad para respirar. Aunque muchas personas crean que tienen un simple resfriado mal curado, es importante que, si la tos y el malestar se prolonga por un tiempo, es necesario acudir al médico de inmediato.