Opinión

Chivite, marioneta de separatistas y proetarras

La secuencia de los hechos es la siguiente: la presidenta de la Comunidad Foral de Navarra, la socialista María Chivite, se comprometió durante la reciente audiencia en la que fue recibida por el Rey a levantar el veto que el anterior Ejecutivo impuso al Monarca para evitar su presencia en los actos oficiales navarros. Chivite, concretamente, invitó a Felipe VI a presidir una reunión del Xacobeo 2021, así como a recuperar la presencia de la  Casa Real en la entrega de los premios Princesa de Viana.

Pero el ofrecimiento de Chivite tiene pinta de durar muy poco, porque Uxue Barcos, líder de Geroa Bai, le ha recordado a la presidenta que «existe una mayoría republicana en el Parlamento». Convertida en una marioneta en manos de separatistas y proetarras, que fueron quienes la hicieron presidenta del Gobierno foral, Chivite ha tratado de desviar la atención criticando a Navarra Suma en lugar de hacer valer su cargo para corregir a Uxue Barcos. De modo que todo apunta a que el infame veto de los bilduetarras y separatistas al Rey seguirá en vigor.

Bildu y Geroa Bai saben bien que están ante una oportunidad histórica de afianzar su estrategia de «euskaldunización» de Navarra y han visto en la ambición política de María Chivite una baza a explotar. Por ahora todas sus demandas han sido aceptadas por la dirigente socialista, capaz de vender Navarra y deshonrar la memoria de sus compañeros socialistas asesinados por ETA. No podía caer más bajo en menos tiempo: una a una todas las reivindicaciones de Bildu y Geroa Bai han contado con el visto bueno de una presidenta títere.

Que nadie tenga duda de que la advertencia de Uxue Barcos -«existe una mayoría republicana en el Parlamento»- conseguirá que Chivite no haga nada para levantar  el veto al Rey. Porque gracias a la traición del socialismo, en Navarra siguen mandando los mismos.