Armengol ya ejerce de agencia colocadora

La factura clientelista que se va a encontrar el PP cuando vuelva a gobernar Baleares en mayo será de nuevo gigantesca. No sólo eso. Directamente será inasumible. Tal y como revela hoy OKBALEARES, la Conselleria de Salud ha diseñado jefaturas de área fijas para 37 personas, 11 de las cuales ya han sido concedidas a altos cargos y directivos de la propia Conselleria y 26 son de nueva creación. Una carga presupuestaria innecesaria y caprichosa con el único objetivo de «colocar a los nuestros».

Así, sin ni siquiera tener que pasar un examen lo que, por supuesto, les exime de acreditar la preparación profesional que se le exigiría a cualquier otro opositor, 37 socialistas ya están colocados para los próximos cuatro años con independencia de lo que suceda en las elecciones de mayo. La red clientelar del PSOE continúa creciendo a expensas del dinero de los impuestos en lo que algún día, en el futuro, será considerado como el mayor fraude de la historia de la democracia.

Ya va siendo hora de que se detenga esta sangría. Ya va siendo hora de que el socialismo deje de ejercer como agencia colocadora con el dinero de los demás y se le exijan responsabilidades por una gestión económica que va a pesar como una losa en la siguiente legislatura. Esta película, cuyo argumento conocemos todos, debe terminar. Lo que le tocará ahora a la derecha será aplicar una serie de recortes imprescindibles para frenar el gasto desbocado de los socialistas y la respuesta será que los sindicatos, callados como muertos durante estos cuatro años porque ellos son los primeros en ser alimentados por las subvenciones, saldrán a incendiar las calles. Y luego, vuelta a empezar.

Acabar con esta trama criminal debe ser el primer objetivo del PP.  Y no le deben doler prendas en hacerlo pese al enorme sacrificio y desgaste que va a suponer porque se encontrará de frente con una ingente cantidad de subvencionados que dependen del dinero público, pero a esto hay que ponerle un freno y comenzar a investigar, uno a uno, todos los nombramientos efectuados. Está en juego desenmascarar el mayor caso de nepotismo de la historia de Baleares.