RECEPCIÓN ANTES DE LOS JUEGOS OLÍMPICOS

Sánchez no quiere otro ‘Carvajal’: evita el pasamanos al recibir a los deportistas olímpicos en Moncloa

Pedro Sánchez evitó hacer un pasamanos en el recibimiento a los deportistas olímpicos y paralímpicos

Moncloa organizó una recepción en la que Sánchez no tuviera que saludar uno por uno a los deportistas

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Sánchez recibe a los deportistas olímpicos y paralímpicos en Moncloa.

Pedro Sánchez evitó hacer un pasamanos en el recibimiento en Moncloa a los deportistas olímpicos y paralímpicos que participarán en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024. Con ausencias muy sonadas como la de Rafa Nadal o Carlos Alcaraz, que ya están en la capital francesa, el presidente del Gobierno no quiso que en esta recepción se repitiera la escena que protagonizó Dani Carvajal hace una semana.

Después del recibimiento a los campeones de la Eurocopa, que no le salió a Sánchez como quisiera al encontrarse con la indiferencia de la mayoría de los futbolistas, el presidente del Gobierno se rodeó de deportistas olímpicos y paralímpicos en Moncloa para tener una potente foto antes de los Juegos Olímpicos y en un momento tan difícil para él con los escándalos por el caso de su mujer, Begoña Gómez, y tras su citación a declarar como testigo.

En la recepción de este martes, el presidente del Gobierno sí se llevó unos aplausos, pero lo hizo cuando entró en la sala de Moncloa. Los deportistas ya estaban allí, en la sala esperando, cuando Sánchez entró acompañado de Pilar Alegría, ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes, y José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del Consejo Superior de Deportes.

La recepción fue organizada por Moncloa y los deportistas, así como sus representantes (Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico y Miguel Carballedo, presidente del Comité Paralímpico), se ciñeron a lo que les dijo Moncloa, que fue que entraran en la sala y esperaran allí al presidente del Gobierno.

Así, no hubo pasamanos con el presidente, como sí ocurrió hace una semana con los campeones de la Eurocopa. Tras el frío saludo de Dani Carvajal, desde Moncloa quisieron evitar que cualquier deportista pudiera hacer lo mismo, dejando así otra imagen dolorosa para un Pedro Sánchez que salió muy mal parado de su intento de apropiación de la victoria de la selección española de fútbol.

En su recepción Pedro Sánchez dio la bienvenida a este casi centenar de deportistas olímpicos y paralímpicos y explicó que para él «es  un acto especialmente emotivo» porque «vais a vivir probablemente el mayor de los sueños que puede tener cualquier deportista, vivir una experiencia que os va a acompañar para el resto de vuestra vida».

Para el presidente del Gobierno, en la sociedad española hay un «inmenso orgullo que toda la ciudadanía siente por vosotros y vosotras» y «nada ni nadie os podrá quitar nunca el triunfo que representan el honor de representar a un gran país que es España en unos Juegos Olímpicos».

Sánchez se dirige a los deportistas

«Menos de 2.000 españoles han tenido el inmenso honor de representar a nuestro país. Lo duro lo habéis hecho. Cada uno representa una historia de esfuerzo, de sacrificio, de entrega y de pasión. Detrás de vosotros hay una gran familia que se ha volcado, entrenadores que creyeron en vosotros», comentó el presidente del Gobierno.

«A París va una delegación, la más numerosa desde Barcelona, 192 mujeres y 190 hombres, algo que nunca había ocurrido. Han tenido que pasar 128 años y 33 Juegos Olímpicos para que la mitad de la sociedad ocupara el lugar que le corresponde por pleno derecho», añadió

Además, Sánchez utilizó su discurso para equiparar los éxitos de los deportistas españoles con la democracia: «Es la España a la que representáis: una España y una democracia moderna, solidaria, respetuosa, abierta, tolerante, que impulsa el mérito y que no acepta la discriminación, que hace del deporte una bandera por la que es nuestro país es reconocido a nivel internacional.

Asú, Sánchez quiso hablar hasta de historia de España: «En esa línea de la democracia trasladar una reflexión: no es casual que democracia en España y éxito en el deporte vayan de la mano. Hasta 1976 nuestro país había ganado apenas 10 medallas en 12 Juegos Olímpicos, en las 12 siguientes, ya en democracia, España ha conseguido 160 medallas. El mérito es enteramente vuestro, pero quiero reconocer el empuje del Comité Olímpico, Paralímpico y de las administraciones que han puesto su granito de arena».

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