El trabajo fiscal encargado al padre de Espinar provocó pérdidas de 3 millones a Fuenlabrada
La revisión de las ordenanzas fiscales de Fuenlabrada encargada a Ramón Espinar Gallego provocó una pérdida de ingresos superior a 3 millones de euros al Ayuntamiento madrileño. El consistorio gobernado entonces por el actual presidente del PSOE de Madrid PSM, Manuel Robles, le adjudicó esta labor en junio de 2010 por 67.765 euros.
El contrato formalizado con el padre del senador, diputado regional y secretario general de Podemos en Madrid, Ramón Espinar Merino, exigía la “prestación del servicio de revisión, adaptación y actualización de las ordenanzas fiscales reguladoras de los tributos propios y de los precios públicos aplicables en el municipio de Fuenlabrada”.
Según un informe del Tribunal Económico-Administrativo Municipal de Fuenlabrada TEAMF, al que ha tenido acceso OKDIARIO, remitido en marzo de 2013 al entonces alcalde del municipio, Manuel Robles, sólo en los dos primeros años tras la revisión fiscal de Espinar (2011-2012) el consistorio madrileño registró una pérdida de ingresos de 800.000 euros con la liquidación del Impuesto de Actividades Económicas IAE.
El TEAMF asegura en el escrito que “en noviembre de 2011 se presentaron las primeras reclamaciones contra las liquidaciones del IAE alegando que la ordenanza fiscal no recogía la motivación de los índices de situación, ni estaban justificadas las categorías de las calles. Estas reclamaciones fueron estimadas por el TEAMF por lo que se anularon suponiendo una disminución de ingresos en el IAE de más de 300.000€”.
“El problema se agudiza”, añadía el Tribunal Económico-Administrativo Municipal de Fuenlabrada, “cuando se presentan más de 50 reclamaciones que suponen, de estimarse por el TEAMF como las del ejercicio de 2011, una disminución de ingresos por el IAE superior a los 500.000€”.
“De no estimarse las reclamaciones si se recurriesen ante el contencioso el perjuicio patrimonial podría ser ostensiblemente mayor. Esta encrucijada motivó que por parte del TEAMF se elaborasen, el 29 de diciembre de 2012, sendos documentos denominados ‘problemática de la gestión del IAE en relación a los coeficientes de situación y categorías de las vías públicas’ y ‘estudio-opinión sobre el informe remitido al TEAMF por la OTAF (Oficina Tributaria del Ayuntamiento de Fuenlabrada’” concluía el TEAMF.
Según las fuentes consultadas por este diario, muchas de las “revisiones fiscales” efectuadas por Espinar carecían de los pertinentes informes técnicos y tuvieron que ser reformuladas o subsanadas en fechas posteriores por la Oficina Tributaria del Ayuntamiento de Fuenlabrada. Concretamente por su entonces director gerente, Emiliano Sanz. De hecho, el PP presentó alegaciones a este respecto, antes de aprobarse el citado expediente de ordenanzas fiscales.
El 30 de diciembre de 2010, el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid BOCM publicaba el nuevo texto de las ordenanzas fiscales y reguladoras de los precios públicos del Ayuntamiento de Fuenlabrada elaborado por Ramón Espinar Gallego, que recogía modificaciones sobre los impuestos de bienes inmuebles (IBI), vehículos de tracción mecánica (IVTM) o sobre actividades económicas (IAE).
También, se aprobó la tasa por utilización privativa o aprovechamiento especial del dominio público local, conocida popularmente como vado municipal. Las reclamaciones económicas al consistorio y por vía judicial no tardaron en llegar.
Sin embargo, las pérdidas provocadas por el trabajo de Ramón Espinar Gallego no terminaron aquí. Los presupuestos del año 2016, a los que ha tenido acceso este diario, recogen una previsión de una disminución del presupuesto por la liquidación del IAE de 1,1 millón de euros en dicho ejercicio.
“El Equipo de Gobierno municipal está tramitando una modificación de dicha Ordenanza Fiscal, hoy en fase de alegaciones, para que su aprobación definitiva tenga ya en cuenta las variaciones mencionadas, produciéndose así una variación correlativa del límite de gasto computable inicialmente considerado, ya que, frente a la prevista en el cálculo del límite de gasto inicialmente aprobado, la cuota tributaria a liquidar en 2016 por este concepto se reduce en un importe estimado en 1.100.000 euros, como resultado de esta nueva variación normativa, disminución que ha de tener reflejo en el ajuste a aplicar por esta causa en el indicado límite de gasto” señalaba la memoria de los presupuesto municipales del consistorio madrileño del 2016.
Esta pérdida de ingresos prevista se repetía en el 2017, por lo que la revisión fiscal de Espinar ha provocado unas pérdidas superiores a los 3 millones de euros sólo en 4 ejercicios documentados. Cabe destacar que las liquidaciones del impuesto fueron incluso inferiores a las previsiones estimadas por el consistorio.
Las pérdidas son «incuantificables»
El Ayuntamiento de Fuenlabrada dejó de ingresar 2,2 millones entre 2016 y 2017 que se suman a los 800.000 euros perdidos en 2011 y 2012 hasta superar los 3 millones, sólo por el Impuesto de Actividades Económicas.
No obstante, los años 2013, 2014 y 2015 están sin computar por este concepto por lo que el daño económico provocado por la revisión fiscal por la que se pagaron 67.400 euros a Ramón Espinar Gallego es mucho mayor. A esto, habría que añadir las repercusiones negativa en la recaudación de otros impuestos modificados por el propio Espinar.
Cabe destacar que muchas de las reclamaciones presentadas ante el Ayuntamiento de Fuenlabrada y el TEAMF relacionadas con la liquidación del IAE y de otras tasas municipales derivaron en numerosas denuncias ante varios Juzgados de lo Contencioso de Madrid. Muchos casos llegaron también hasta el Tribunal Superior de Justicia de Madrid TSJM, siendo estimados en su mayoría, obligando al Ayuntamiento de Fuenlabrada a devolver las tasas cobradas.
A día de hoy, las pérdidas millonarias para el consistorio de Fuenlabrada tras la revisión fiscal adjudicada a Espinar por el exalcade y actual presidente del PSM, Manuel Robles, «son incuantificables».