La extraña historia de las jirafas en la Antigua China
Entre las leyendas e historias vinculadas a animales, vemos aquí la extraña historia de las jirafas en la antigua China.
Datos curiosos de las jirafas
Lo que no sabías de las jirafas
Animales mitológicos más letales de la historia
La exploración china del mundo tuvo un breve esplendor exactamente entre los años 1405 y 1433, pero durante el mandato del emperador Ming Yongle se realizaron numerosas misiones comerciales, algunas a África, que volvían con animales exóticos. Sin embargo, la jirafa era especial, pues se parecía a Ch´i-lin, una especie de unicornio mitológico que se asociaba con cualidades virtuosas y que, según la tradición confuciana, su posesión legitimaba el poder.
La llegada de las jirafas a China en el siglo XV
El emperador Ming Yongle ya había realizado 3 expediciones exitosas, y había conseguido buenos contactos comerciales en África. Durante la cuarta expedición en el año 1413, la flota dirigida por el comandante Zheng He tomó contacto con marinos del estado de Malindi (actual Kenia).
Ellos se dirigían a la India con algunos animales que pensaban entregar como tributos. De todos los que había, los chinos eligieron a la jirafa. En el 1415, Malindi envió otra jirafa a China, junto con una cebra y un orix.
La quinta expedición comercial china a la región consiguió una gran cantidad de animales africanos, incluyendo antílopes, leopardos, leones, avestruces, rinocerontes, cebras y un gran lote de jirafas.
La jirafa y el Ch´i-lin mitológico
Para los chinos, todos los animales eran exóticos, pero la jirafa era particularmente especial porque se asemejaba a su Ch´i-lin. La tradición confuciana dice que este animal tiene un cuerno cubierto en la frente, y algunos machos de jirafa desarrollan un tercer cuerno en la mitad de la frente, cubierto de piel.
Además, este personaje mitológico podría tener alternativamente dos o tres cuernos, al igual que las jirafas. Otra similitud relevante es que el Ch´i-lin tenía el cuerpo de un ciervo, las patas con pezuñas y la cola de un buey. Generalmente se imaginaban de color blanco, aunque eran coloreados en rojo, amarillo, azul, blanco y negro, colores que son naturales en la jirafa.
Los Ch´i-lin se asociaban con la gentileza y la bondad y, según la tradición, poseer alguna de las bestias míticas, así como el dragón, el fénix o la tortuga, legitimaba el poder.
Las jirafas de Ming Yongle
Cuando Yongle asaltó Nanjing con un ejército de varios cientos de miles de hombres, su hermano Jianwen murió en el incendio del palacio, y él consolidó su legitimidad como el segundo emperador Ming. Yongle no tuvo uno sino varios Ch´i-lin y, seguramente, eso le aseguró el trono toda su vida.
Pero la exploración china culmina con su muerte y el aislacionismo volvió a hacerse cargo de la política china. Se volvieron a imponer restricciones al comercio privado y las extraordinarias flotas mercantes fueron abandonadas. Fue así como finalizó la importación de Ch´i-lin, o de jirafas, a China.
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