Historia
Antigua Roma

¿Cómo fueron los últimos días de Pompeya?

Los últimos días de Pompeya fueron tiempo de caos, miedo y desesperación para sus habitantes, sorprendidos por la furia del volcán Vesubio.

5 curiosidades sobre Pompeya

Historia de Pompeya

Pompeya, ¿cómo murieron las víctimas del Vesubio?

  • Francisco María
  • Colaboro en diferentes medios y diarios digitales, blogs temáticos, desarrollo de páginas Web, redacción de guías y manuales didácticos, textos promocionales, campañas publicitarias y de marketing, artículos de opinión, relatos y guiones, y proyectos empresariales de todo tipo que requieran de textos con un contenido de calidad, bien documentado y revisado, así como a la curación y depuración de textos. Estoy en permanente crecimiento personal y profesional, y abierto a nuevas colaboraciones.

La erupción del Vesubio en el año 79 d. C. fue una catástrofe devastadora que enterró a Pompeya bajo una capa de cenizas y otros productos volcánicos. Este evento causó la destrucción de la ciudad y de una gran zona aledaña.

Esta catástrofe causó la muerte de miles de personas y sentenció el final de Pompeya, una ciudad que había sido gloriosa. El estudio de este evento ha sido fundamental para la comprensión de la historia y la arqueología de la antigua Roma.

Datos sobre la ciudad

Pompeya era una ciudad próspera y bulliciosa en la época romana, con una población estimada de alrededor de 20.000 habitantes. Estaba ubicada en la región de Campania, cerca de la actual ciudad de Nápoles, en Italia. La ciudad estaba situada en las faldas del volcán Vesubio, que había entrado en erupción en el pasado, pero sus habitantes no tenían conocimiento de la magnitud del peligro que representaba vivir tan cerca de un volcán activo.

Los días previos a la erupción del Vesubio fueron aparentemente normales para los habitantes de Pompeya. Sin embargo, se han encontrado evidencias de que hubo pequeñas señales de actividad sísmica que podrían haber alertado a la población de un posible peligro inminente. A pesar de esto, muchos habitantes de la ciudad decidieron quedarse y no evacuar, confiando en que estarían a salvo en sus hogares.

El inicio de la tragedia

La erupción del Vesubio ocurrió en octubre del año 79 y no en agosto como se pensaba antes. Plinio el Joven dejó un relato detallado de la erupción a través de dos cartas escritas a Tácito, varios años después del evento.

Irónicamente, Pompeya estaba en proceso de reconstrucción al momento de la erupción. Un terremoto la había devastado dieciséis años antes. El 24 de octubre, los habitantes de Pompeya se despertaron sobresaltados por temblores y ruidos inusuales. Esto desató un estado de alerta.

Comenzó a correr el rumor de que el Vesubio estaba emanando gases. Esto incrementó la preocupación de los pompeyanos. Al mediodía, la situación se volvió dramática, cuando se produjo un gran estrépito y una columna de gases y materiales volcánicos comenzaron a salir del Vesubio.

La erupción del Vesubio

La erupción comenzó con grandes explosiones que interrumpieron las actividades diarias en Pompeya. Generó una columna eruptiva que se elevó hasta 32 km de altura, formando un “penacho pliniano”. La caída de piedras pómez y otros materiales volcánicos cubrieron la ciudad a un ritmo de 15 cm por hora.

La composición de los materiales volcánicos cambió con el paso de las horas. Así se inició una lluvia de piedras pómez más “grises”. La acumulación de estas piedras y otros materiales volcánicos sobre los techos de las construcciones probablemente causaron su colapso.

Algunos habitantes de Pompeya decidieron refugiarse en sus casas. Esta fue una decisión fatal, ya que poco tiempo después perecieron bajo los techos colapsados.

Los trabajadores de una panadería en el foro fueron sorprendidos por la erupción, dejando una hornada de pan carbonizada en el horno. Los arqueólogos descubrieron esta evidencia miles de años después.

Una enorme catástrofe

En la madrugada del 25 de octubre se produjo la mayor devastación. Las columnas eruptivas colapsaron. Esto generó nubes ardientes que descendieron por los flancos del volcán. Una andanada de esas nubes descendió del Vesubio, alcanzando temperaturas extremadamente altas y velocidades muy rápidas.

Los habitantes de Herculano, una ciudad cercana, apenas tuvieron tiempo para escapar, pero muchos murieron por shock térmico. Prácticamente perecieron todos los habitantes de este lugar.

En el norte de Pompeya se produjo una gran destrucción. Las excavaciones han revelado restos de personas y animales que intentaban huir. Otras dos oleadas de nubes ardientes piroclásticas llegaron a la ciudad, pero no causaron gran destrucción.

Fue la sexta colada la que remató los edificios y a los supervivientes. Al atardecer del 25 de octubre, Pompeya había desaparecido casi por completo bajo toneladas de material volcánico. La ayuda llegó rápido, pero muchos murieron y otros lo perdieron todo. Se estima que un 10% de la región pereció en la erupción.

Descubrimientos

Las excavaciones arqueológicas realizadas en Pompeya han permitido descubrir una ciudad congelada en el tiempo, con sus calles, casas, templos y teatros perfectamente conservados bajo las capas de cenizas. Los restos de los habitantes de la ciudad han sido encontrados en diferentes posiciones, lo que ha permitido a los investigadores reconstruir cómo fueron los últimos momentos de vida de los ciudadanos de Pompeya.

Se han encontrado restos de personas que intentaron refugiarse en sus casas, otros que trataron de escapar por las calles y algunos que buscaron protección en los templos y edificios públicos. También se han descubierto evidencias de que hubo intentos de rescate por parte de las autoridades romanas, que enviaron barcos a la costa para evacuar a los sobrevivientes, aunque la mayoría de ellos llegaron demasiado tarde.

El testigo

La erupción del Vesubio fue documentada por Plinio el Joven en algunas de sus cartas. Su tío, Plinio el Viejo, murió durante la erupción por inhalación de gas sulfuroso mientras intentaba huir.

Plinio el Joven logró escapar de Miseno y observó desde lejos cómo la erupción afectaba a Pompeya. Gracias a él se conserva una descripción de la oscuridad y la caída de cenizas sobre la ciudad.

El estudio de las víctimas de la erupción del Vesubio en Pompeya ha sido un proceso continuo, desde los primeros descubrimientos hasta las técnicas más recientes. A través de estos descubrimientos, se ha podido aprender más sobre cómo ocurrió la erupción y cómo afectó a la población de la época.

Lecturas recomendadas

Los últimos días de Pompeya

Pompeya a la sombra del Vesubio