Historia
Historia Contemporánea

Las 4 batallas más sangrientas de la historia

Como se suele decir en muchas películas y relatos históricos, «la historia se escribe con sangre». Una frase que sirvió de hilo conductor para el siglo XX donde se libraron las batallas más sangrientas de la historia. La I Guerra Mundial, conocida como «La Gran Guerra», y la II Guerra Mundial fueron los dos conflictos bélicos más sanguinarios de la historia y, aunque después se han ido sucediendo diferentes conflictos armados, ninguno a llegado a superar el número de bajas y víctimas producidos en las dos grandes guerras del mundo contemporáneo.

Batalla de Verdún (1916)

Sigue siendo la batalla de la resistencia francesa durante la I Guerra Mundial. Más de 750.00 soldados murieron o fueron heridos de gravedad en esta batalla que implicó a Alemania y Francia. Los alemanes vieron en esta batalla la gran oportunidad de ganar la guerra, pero la resistencia francesa y los más de 300 días que duró la contienda, cambiaron el rumbo de la guerra para siempre. Se trata de una de las batallas más sangrientas de la historia que se recuerdan.

Batalla del Somme (1916)

En este sentido, si la batalla de Verdún fue el símbolo de la resistencia francesa contra Alemania, la se Somme se convirtió en el orgullo británico en los años posteriores. Se estima que más de 1 millón de soldados de ambos frentes murieron o fueron heridos, en una disputa en la parte norte de Bélgica.

A pesar de lo sangriento de la batalla de Somme, lo cierto es que no tuvo demasiada repercusión en el transcurso de la guerra ya que el ejército británico, tras meses de ofensivas, no logró avanzar más que un puñado de kilómetros.

Batalla de Stalingrado (1942 – 1943)

Si existe una batalla recordada y conocida a lo largo del siglo XX esa fue la de Stalingrado. En su camino hasta la conquista de Europa, Hitler había decidido avanzar hacia el sur y se encontró con Stalingrado. Se convirtió en una verdadera lucha simbólica de los dos frentes en guerra y a la postre sería el principio del fin de la pesadilla nazi.

Stalingrado se convirtió en la batalla urbana más cruel y sangrienta de la historia, y se convirtió en el punto de inflexión para que la Alemania de Hitler comenzara a pensar que la guerra no estaba ganada.

Batalla de Berlín (1945)

Fue otra de las grandes batallas de la II Guerra Mundial. Corta pero intensa, supuso el fin de la Alemania nazi ante sus rivales. La ciudad de Berlín quedó devastada por los bombardeos y la población asustada por la llegada de cientos de soldados que convirtieron la capital alemana en un campo de batalla lleno de muerte y horror.

La cúpula nazi fue capturada y Hitler se suicidó en su búnker, lo que vino a significar el fin de la guerra semanas después.