Vox y Cs llevan al Congreso la reprobación de Marlaska por los acercamientos de presos de ETA

El ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, se enfrenta esta semana a dos mociones -presentadas por Vox y Ciudadanos- que exigen su reprobación por los continuos y masivos acercamientos de presos de la banda terrorista ETA a cárceles del País Vasco y Navarra. Ambas iniciativas serán planteadas y sometidas a votación en el Pleno del Congreso.

No hay visos de que prosperen, ya que el Gobierno de Pedro Sánchez tiene asegurada la mayoría -incluidos los votos de EH Bildu- para tumbar ambas reprobaciones. Sin embargo, el Congreso sí debatirá esta semana el posicionamiento de Interior en el acercamiento de presos de ETA, que ya rondan los 160 y que en algunas ocasiones se producen llevando la contraria a las juntas de tratamiento penitenciario de las prisiones en las que cumplen sus condenas los etarras. Eso mismo ocurrió esta misma semana con el acercamiento de Harriet Iragui Gurruchaga, asesino del fiscal jefe de Andalucía Luis Portero.

Ambos escritos, el de Vox y el de Ciudadanos, surgen tras los debates que los dos partidos escenificaron el miércoles con Grande Marlaska en el Congreso, cuestionándole si esos acercamientos eran parte de la estrategia de pactos con EH Bildu.

Sobre la mesa están los ya sistemáticos acercamientos, alrededor de media docena cada viernes, que se anuncian desde la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias.

Instituciones Penitenciarias autorizó este viernes otros seis acercamientos de presos de ETA más, siento ya 160 etarras trasladados de prisión por el Gobierno de Pedro Sánchez. El número total supone el 81% de los 197 que cumplen condena por delitos de terrorismo.

«Incapacidad e incompetencia»

Según lo planificado, Vox planteará directamente «la reprobación» del ministro «por su incapacidad e incompetencia», así como por «su política de acercamientos y progresiones de grado y demás beneficios otorgados a presos de ETA», y por lo que consideran «permisividad con la celebración de actos de homenaje» a los etarras.

La formación que dirige Santiago Abascal exigirá también en el Congreso que se obligue al Gobierno a mantener la política de dispersión de presos de ETA que se había venido aplicando desde hace décadas. Además, solicitan que se tomen todas las medidas necesarias para prohibir los homenajes a etarras, ya sean fallecidos o excarcelados.

Vox propone que se llegue a un acuerdo para endurecer las sanciones a estos actos de enaltecimiento, modificando para ello la Ley de Víctimas para incluir multas de 200 a 150.000 euros para todas las personas físicas o jurídicas que participen en actos o justifiquen delitos terroristas y a sus autores.

Por último, Vox quiere que se inste al Gobierno llevar a cabo «una deslegitimación del terrorismo» de ETA mediante la utilización de «un lenguaje claro y nítido que no deje la más mínima duda de una organización terrorista llamada ETA», que ha provocado 856 víctimas mortales, miles de heridos y miles de amenazados y desplazados.

Acercamientos a cambio de apoyos

Ciudadanos también participa de esta iniciativa pero lo hace con un texto propio, en el que busca que la Cámara Baja «repruebe la política de acercamiento de presos etarras» y que el Gobierno se comprometa a no acercar a ningún preso que no acredite su arrepentimiento «de manera explícita e indubitada, más allá de cartas tipo y formularios estandarizados», y que no muestre su «total disposición» a colaborar con la Justicia.

La formación que dirige Inés Arrimadas exige al Gobierno dejar claro si esos traslados se llevan a cabo «a cambio de apoyos parlamentarios de Bildu», partido al que considera «heredero del terrorismo y que aún no ha condenado su violencia».