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Iglesias rabia por la imputación de su nº 3 por patear a un policía: «Ni un paso atrás, hermano»

Pablo Iglesias, vicepresidente segundo y líder de Podemos, ha rabiado en las redes sociales después de que el Tribunal Supremo haya citado a declarar a Alberto Rodríguez, secretario de Organización de la formación morada y diputada en el Congreso, por agredir presuntamente a un policía hace seis años en Canarias. «Ni un paso atrás hermano», ha señalado el dirigente podemita en su perfil de Twitter junto a un emoticono de un puño en alto.

El líder de la formación morada ha citado también en su tuit una frase de Jimmy McNulty, uno de los personajes de ficción de la serie The Wire de HBO. Iglesias ha querido volver a demostrar su conocimiento sobre series de televisión, esta vez para defender a otro dirigente de su partido que tiene problemas con la justicia.

Rodríguez deberá decidir ahora si acude o no a declarar ante el juzgado instructor. En caso de que el dirigente podemita no lo haga, el juez deberá enviar un suplicatorio al Congreso de los Diputados para solicitar su declaración. Este suplicatorio debería ser votado en la Cámara Baja y, en caso de que saliese adelante, el diputado de Podemos debería acudir a declarar de forma obligatoria.

Altercados de 2014

Los hechos que involucran a Alberto Rodríguez ocurrieron en 2014, cuando participó en una protesta contra la LOMCE que se organizó con motivo de la visita a La Laguna (Tenerife) de José Ignacio Wert, entonces ministro de Educación con el Gobierno de Mariano Rajoy. Wert acudió para participar en la inauguración de la catedral de la localidad.

Esta protesta acabó en insultos hacia los agentes desplegados y en lanzamiento de todo tipo de objetos contra ellos. Varios policías acabaron agredidos. Según los atestados policiales, el diputado podemita participó en estos ataques hacia las autoridades.

A pesar de esto, Pablo Iglesias no ha dudado en defender a su dirigente a través de las redes sociales. La citación del secretario de organización de Podemos coincide también con una posible imputación del vicepresidente segundo. La semana pasada, Manuel García-Castellón, juez de la Audiencia Nacional, pidió al Tribunal Supremo que investigase al líder podemita por la comisión de tres delitos en el caso Dina-Iglesias: descubrimiento y revelación de secretos, con agravante de género, daños informáticos y acusación o denuncia falsa o simulación delito.